Nicaragua

Con Pedro Ortega de la Mesa Laboral de Sindicatos de la Maquila

Un reto para el 2007:

más sindicatos y más organización

 

 

Gracias a las políticas permisivas de los pasados gobiernos, a los desmedidos beneficios fiscales y a la presencia de la mano de obra más barata de la región, Nicaragua se ha vuelto el principal destino para las empresas maquiladoras que quieren invertir en Centroamérica.

 

Actualmente existen aproximadamente unas 80 empresas, principalmente asiáticas y norteamericanas, que emplean a más de 80 mil personas en todo el país. Según las previsiones, antes de que finalice el año el sector de la maquila podría ocupar a más de 100 mil personas.

 

El desarrollo de este cuestionado sector ha llevado consigo una interminable secuela de violaciones a los derechos humanos, laborales y sindicales de las trabajadoras y trabajadores. Las organizaciones sindicales y parte de la sociedad civil nicaragüense han sido los únicos que han levantado su voz para denunciar los atropellos que se cometían en las empresas maquiladoras, mientras que el Gobierno y el Ministerio del Trabajo (MITRAB), en muchos casos, han sido cómplices silenciosos de un sistema de aberrante explotación o partícipes activos en ello.

 

A menos de un mes de haberse instalado el nuevo gobierno, las trabajadoras y trabajadores organizados de la maquila se reunieron con el nuevo secretario ejecutivo de la Corporación de Zonas Francas, General Álvaro Baltodano y con la nueva ministra del trabajo, Lic. Jeanette Chávez, para plantearles las urgentes problemáticas de este sector y sus propuestas para el futuro.

 

SIREL conversó con Pedro Ortega dirigente sindical de la Mesa Laboral de Sindicatos de la Maquila (MLSM) para conocer los resultados de estas reuniones, las perspectivas de este sector y como las organizaciones sindicales se están preparando para este nuevo panorama político y económico del país.

 

-¿Qué planteos se hicieron en estas reuniones?

-A la ministra del trabajo le planteamos la problemática laboral que se dio en la administración pasada, sobre las violaciones de los derechos laborales y de la libertad sindical. Durante nueve años nos negaron negociar Convenios Colectivos y nos pusieron trabas para que no constituyéramos sindicatos. Presentamos casos muy puntuales, como lo de la empresa Chapri-Mil Colores donde siguen las violaciones a los derechos de los trabajadores y situaciones que hay que corregir de inmediato, como son las inspecciones del Ministerio en las empresas. Había empresas que no dejaban entrar a los inspectores o eran los mismos funcionarios del Ministerio que les avisaban cuando los inspectores iban a llegar. En muchos casos los verbales de los inspectores salían amañados porque estaban coludidos con los empresarios. Nuestra propuesta es que, donde hay sindicato, las inspecciones se hagan con la participación de los dirigentes sindicales y esto ya se está dando en estos días. Hay empresas donde hacía años que los inspectores del Ministerio no entraban y ahora sí y están revisando todas las irregularidades, como por ejemplo la existencia de dobles planillas para ocultar la gran cantidad de horas extras que imponen a los trabajadores.

 

-¿Qué otros puntos tocaron?

-Otro punto fue el respeto a los términos establecidos por la ley para la inscripción de un sindicato. La ley prevé un término máximo de diez días, mientras que en el pasado se dilataban hasta de tres a seis meses. Además, la ministra se comprometió a no permitir que un sindicato que cumpla con los requisitos de ley sea impugnado por un empresario o por otra central sindical, como ocurría en el pasado. En los próximos días la ministra va a comenzar a visitar a las empresas para acercarse y escuchar a los trabajadores, mejorando también la imagen del Ministerio que carga con un pasado muy negativo. La posición de la ministra es mantenerse apegada a la ley, dando la razón a quien la tenga. Para nosotros es muy importante, porque por primera vez en la historia se va a respetar la ley y se van a castigar los actos de corrupción de los funcionarios que no cumplan con la ley.

 

-En Nicaragua el Ministerio del Trabajo tiene muy poco poder coercitivo con las empresas que violan los derechos laborales. ¿Qué plantean ustedes al respecto?

-Para fortalecer más la ley y para que el empresario cumpla con ella se presentó en la asamblea un proyecto para crear la “Ley de Inspección General” y otro para la “Ley de Seguridad e Higiene Ocupacional”. De ser aprobadas, estas leyes les darían más poder coercitivo a los Inspectores del Trabajo y se podría también mejorar la situación de Higiene y las condiciones laborales. Para la protección de los trabajadores frente a los despidos injustificados se debería de reformar el Código del Trabajo, pero actualmente no parece ser el momento más oportuno y no existe una correlación de fuerzas en el Parlamento para una reforma que beneficie a los trabajadores. En estas reuniones que acabamos de tener pedimos a la ministra y al secretario ejecutivo de la Corporación de Zonas Francas que comenzaran un recorrido por las empresas, para hablar con los trabajadores, con los sindicatos y con los mismos empresarios. Les aconsejamos que hicieran recomendaciones a los empleadores para que se permitan las libertades sindicales y el respeto a los derechos de los trabajadores.

 

Pedro Ortega con acta de inscripción de un sindicato

-¿Cuáles fueron los puntos que se abordaron en la reunión con la Corporación de Zonas Francas?

-El nuevo secretario ejecutivo de la Corporación, el General retirado Álvaro Baltodano, convocó a dos reuniones en las que participaron todos los sindicatos. Dijo que, como parte de la política del nuevo gobierno de generar inversión, empleo y estabilidad laboral, parte de su tarea es ir hablando con los inversionistas, para que se les respeten los derechos laborales a los trabajadores y trabajadoras y para que cumplan con los compromisos sociales. Pedimos que haya más comunicación entre la Corporación y los trabajadores, a través de reuniones periódicas. Acordamos reunirnos para conformar una Comisión Tripartita de Zona Franca, para que sea una instancia donde trabajar junto a los empleadores y discutir la problemática laboral. Además, a partir de la creación del Consejo Nacional del Trabajo, que prevé la conformación de mesas multisectoriales, vamos a promover que la Comisión Tripartita se enmarque en este nuevo contexto y se reúna dos veces al año.

Otro objetivo es impulsar la participación ciudadana a través de las diferentes instancias que ya existen y las que se van a crear con las reformas que se están haciendo a nivel de Poder Ejecutivo.

 

-Impulsar la inversión extranjera en Nicaragua y privilegiar la maquila ha sido la política de maquillaje de la administración del ex presidente Bolaños. ¿De qué manera creen que este nuevo gobierno se va a diferenciar?

-El secretario de la Corporación dijo que se va a impulsar una nueva Ley de Zona Franca y que se va a consensuar con todos los sectores involucrados. Nosotros le pedimos que en esta nueva ley se deben incluir tres capítulos estratégicos sobre Derechos Laborales, Medio ambiente y Responsabilidad Social de las empresas. Esto es primordial para garantizarnos frente a la inversión extranjera.

 

-Antes de las elecciones las empresas maquiladoras impulsaron una campaña del miedo, amenazando con irse del país si ganaba Daniel Ortega. ¿Qué reacción hubo después del 5 de noviembre?

-Siempre dijimos a los trabajadores que era un chantaje y que los empresarios son los mejores políticos. Nadie se fue del país y se reunieron varias veces con el nuevo Presidente. Más bien están llegando nuevas empresas o se están ampliando proyectos ya existentes, como es el caso del Consorcio Taiwanés Nien Hsing Textil, la empresa coreana Hansae y la SAE Tecnotex. Sabemos que lo atractivo de Nicaragua son sobre todo los bajos salarios de nuestra mano de obra. Por eso hablamos ya con la Ministra y con el Secretario Ejecutivo de la Corporación para que el próximo mes, cuando se instale la Mesa de Salario Mínimo, uno de los sectores más beneficiados con aumentos salariales sea la Zona Franca. Vamos a preparar una propuesta técnica y la vamos a presentar a los empresarios textiles.

 

-¿La presencia de un nuevo gobierno está generando confianza entre los trabajadores? ¿Ha habido un aumento en la demanda de afiliación a los sindicatos?

-Por el momento algunas empresas siguen con la misma actitud de maniobrar con los “sindicatos blancos”, para evitar que se conforme un verdadero sindicato que trabaje a favor de los derechos de los trabajadores.

Pero hay también otros casos donde ya se mira un cambio de actitud y un crecimiento de afiliación. Hasta los que tenían temor se están organizando. En la SAE Tecnotex, en menos de 15 días afiliaron a más de 500 trabajadores. Como Mesa Laboral de Sindicatos de la Maquila (MLSM) hemos organizado a dos sindicatos nuevos en estos últimos días y pensamos formar otros 20 en el año.

Actualmente hay como 80 empresas en el país y la MLSM tiene 11 sindicatos. Nuestro objetivo es sindicalizar a por lo menos el 40 por ciento de las empresas. Ahora que nos dejan entrar para asesorar y participar en las reuniones de los trabajadores con los empresarios.

En los próximos días vamos a firmar, con la participación del MITRAB, un Convenio Colectivo que la Mesa Laboral negoció con la empresa coreana Hansae y que va a beneficiar a 5 mil trabajadores con un monto aproximado de 40 millones de córdobas (2.3 millones de dólares) en beneficios sociales. Queremos demostrar que con la comunicación, la negociación y la presencia de un sindicato se pueden resolver los conflictos laborales.

 

¿Cuál es la posición de la Mesa Laboral frente al nuevo Gobierno?

El único compromiso que tenemos es con los trabajadores. Vamos a tener nuestra autonomía sindical y vamos a aplaudir o criticar al Gobierno y al MITRAB dependiendo de su actuación.

En Managua, Giorgio Trucchi

© Rel-UITA

5 de febrero de 2007

 

 

 

 Fotos: Giorgio Trucchi

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