La Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha decidido,
conjuntamente con la UITA, publicar una crónica de la
campaña y lucha desarrollada por los trabajadores de Norteña
que, junto a otros actores sociales y políticos, dentro de
los cuales se encontró el presidente Lula, para evitar el
cierre de Norteña y el despido masivo de sus trabajadores,
un hecho al que describieron como histórico.
En el salón Aquistapache del Palacio Municipal, el
intendente Álvaro Lamas, en uno de sus últimos actos de su
administración, recibió a integrantes del la UITA, que
nuclea a unas 353 organizaciones en 125 países y al
Sindicato de Obreros y Empleados de Norteña, afiliado a
dicha organización mundial. En rueda de prensa, el
secretario regional latinoamericano de la UITA, Gerardo
Iglesias, dijo que "el eco que hemos encontrado en épocas de
conflicto en este gobierno municipal no lo habíamos
encontrado antes en este país", y reconoció que casi el 100%
de la permanencia de los puestos de trabajo se debe a la
participación del sindicato, a las fuerzas vivas del
departamento y a una campaña internacional a la que catalogó
como la más efectiva de las que la UITA haya propulsado en
los últimos tiempos.
Lula tuvo la "sensibilidad"
que le faltó a Batlle
"Hemos logrado colocar en la mesa de trabajo del presidente
de Brasil, Lula da Silva, este problema sanducero", dijo
Iglesias. El líder sindical advirtió además que si
"hubiéramos encontrado a nivel nacional en el gobierno
anterior el mismo respaldo que tuvimos en Paysandú, quizás
el resultado hubiera sido otro, si bien el que tuvimos fue
positivo. Pero no encontramos sensibilidad ni en el
presidente Batlle ni en sus ministros", expresó.
Recordó que cuando la multinacional Ambev llega a Paysandú
lo hace con dos claros objetivos. Uno de ellos era el
inminente cierre de la planta y el otro era el despido de
todos sus trabajadores. Negociaciones e intervenciones
mediante, el segundo objetivo la multinacional no lo pudo
lograr, pero el cierre se convirtió en una dura realidad. A
partir de allí, las organizaciones sindicales clamaron por
una ley antimonopólica que el gobierno de Batlle no respaldó
y fue Lula quien se tuvo que ocupar del caso uruguayo,
"mientras -recordó Silveira-, Batlle lo único que hizo fue
recibir a la delegación de Ambev en la estancia presidencial
de Anchorena, ignorando a las otras partes involucradas. Sin
embargo lo que pasó el tiempo lo valorará", agregó.
Mientras tanto en la próxima semana, la UITA impulsará una
ley antimonopólica y espera el apoyo del actual gobierno
para paliar de alguna manera la grave situación que está
pasando la industria de la bebida. Por su parte el
intendente Lamas dijo que "es un orgullo y nos da
satisfacción recibir a esta delegación para expresar el
reconocimiento de la UITA y del SOEN por las gestiones que
hemos realizado, en oportunidad en que la empresa más
paradigmática de Paysandú que fue Norteña se paralizara.
Creemos que por la decidida intervención sindical de la UITA
y por la nuestra, se mantuvo cierta estabilidad", dijo el
jerarca municipal, luego de que la UITA le entregara una
placa en reconocimiento a su gestión ante el recordado
conflicto laboral.
Patricia
Montero
La República
4 de julio de
2005