Síntesis del discurso de Raúl Álvarez, reelecto secretario

general de la Federación Argentina de Trabajadores de Aguas,

Gaseosas y Afines (FATAGA), en la clausura del 62 Congreso Ordinario celebrado en Mar del Plata el 26 y 27 de septiembre.

“(…) En primer lugar quiero agradecer a todos los delegados, a los compañeros que han venido desde Uruguay: muchas gracias por acompañarnos. También saludar a los compañeros de las organizaciones hermanas que forman parte de la Confederación de Asociaciones Sindicales de la Industria de la Alimentación (CASIA).

(…) Con respecto a la referencia que hizo Gerardo (Iglesias) sobre la Federación Latinoamericana de Trabajadores de Coca Cola (FELATRAC), y Coca Cola, comparto que se está haciendo una buena labor y que la Federación ha crecido.

También creo que debemos hablar muy claro con Coca Cola, porque aquí en Argentina están insistiendo con que nuestros salarios son muy altos. Pero el problema real es que son muy bajos en Brasil y Centroamérica.

Sí Coca Cola puede pagar estos salarios en Argentina, tendría que hacerlo también en todos lados. Los salarios en Argentina, además, no son salarios altos, son salarios dignos para vivir.

Por ejemplo, vivir en Uruguay es caro. No es fácil vivir ahí, si a eso le agregamos que hay bajos sueldos, que no lo sé, hablo por boca de los empresarios, entonces están pagando mal.

Lo que hay que decir también es que en Argentina las empresas ganan dinero, son rentables. Nosotros exigimos que se pague a los trabajadores lo que corresponde. FATAGA no pide nada fuera de lugar, que no se pueda pagar. Cada vez que vamos a una paritaria lo hacemos con nuestros números bien hechos, sabiendo cuánto se vende y cuánto ganan las empresas aquí.

(…) Fue un muy buen Congreso y estoy muy agradecido. También este año tenemos elecciones en el Sindicato de San Martín, donde creo que habrá una sola lista, porque lo que estamos haciendo va muy bien. El gremio crece, está bien administrado, somos un buen equipo, porque la verdad es que somos un grupo de amigos muy unidos.

(…) En estos casi 30 años de militancia y conducción, siempre me manejé igual, con respeto y cerca de la gente. Desde la Federación casi obligo a la gente a que estudie, a que se capacite, y nosotros siempre apoyaremos eso.

Y así hacemos cada una de las cosas, con dedicación, pensando en lo que me hubiese gustado que hubieran hecho por mí.

Quiero decirles, simplemente, que soy un poco de cada uno de ustedes, soy un poco de cada uno de los delegados, de cada uno de los secretarios generales que están aquí, con quienes estoy siempre en comunicación.

Puedo decir mil cosas, pero quiero enfatizar en que FATAGA va a crecer, que va a seguir creciendo, que vamos a seguir avanzando. Es muy importante nuestro cuerpo de delegados, y todas las empresas saben que basta un llamado telefónico de nuestra Federación y paramos cualquier planta. Eso no lo pueden hacer muchos gremios (…).