El pasado 30 de diciembre de 2006 dos trabajadores del sector
Distribución –Mauro Pérez, chofer, y “Mingo” Ramos,
ayudante– fueron despedidos por medio de telegramas
colacionados. En enero de 2007 esto desencadenó, entre otras
medidas gremiales, paros parciales hasta que la situación se
resolviera, lo que terminó ocurriendo rápidamente debido a
la ágil actuación del sindicato.
Mediando el pasado noviembre el sector Distribución –que
forma parte de los servicios tercerizados por la empresa
Coca Cola– con el apoyo del Sindicato de Trabajadores de
Coca Cola (STCC) y la Federación de Obreros y
Empleados de la Bebida (FOEB) alcanzó un acuerdo para
establecer la equiparación salarial. Un importante logro que
estará vigente hasta agosto próximo, cuando los
distribuidores deberán negociar un nuevo convenio.
“La preocupación mayor de los compañeros era que estos
despidos desencadenaran una suerte de efecto dominó por el
cual los trabajadores del sector Distribución fueran
sustituidos por parientes de los dueños, como fue el caso de
los compañeros Pérez y Ramos aunque las respectivas empresas
aducen que los despidos fueron motivados por problemas de
índole económica”, comentó Milton Burgos, secretario general
del STCC.
El sindicato planteó convenir un acuerdo similar al de la
FOEB “cámara de 45 días”, que estipula que cuando se
proyecte cualquier tipo de reestructura se fijarán
previamente 45 días de diálogo durante los cuales ambas
partes se abstendrán de tomar alguna medida. Como solución,
se firmó un acta en el Ministerio de Trabajo entre el
sindicato y la Federación del Transporte de la Bebida (FETRABE)
en la cual ésta última se compromete a reintegrar a los
despedidos el pasado diciembre. De hecho, a la fecha ambos
ya están trabajando.
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En Montevideo, Amalia Antúnez
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Rel-UITA
7 de marzo de 2007 |
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