Una nueva Constitución y una Constituyente de elección popular, respeto a los pueblos y el derecho de construir un Estado democrático, descentralizado, intercultural, la construcción de un nuevo pacto social y una economía al servicio de la persona, fueron algunos de los reclamos que se hicieron al gobierno durante la Jornada Nacional de Lucha convocada por el Frente Nacional por la Vida y la Soberanía.

Desde los diferentes puntos de Lima Metropolitana, mujeres y hombres se movilizaron para demandar al gobierno aprista el cambio de modelo económico y político, mientras que en el interior del país el paro fue contundente en Puno, Huancavelica y Ayacucho, regiones en donde las carreteras fueron bloqueadas y el comercio estuvo muy restringido.

Mario Huaman, secretario general de la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP), en el mitin de cierre de la protesta nacional realizado en la histórica Plaza 2 de Mayo, dijo a nombre del Frente Nacional por la Vida y la Soberanía que el modelo económico y político que aplica el presidente Alan García no soluciona ni solucionará los problemas urgentes del país.

“Los peruanos están hartos de escuchar que vivimos en un país con bonanza, sin que ésta sea sentida por los trabajadores”, afirmó, mientras los manifestantes coreaban “Y va a caer, y va a caer, Alan García va a caer”.

Por su parte, Antolín Huáscar, presidente de la Confederación Nacional Agraria (CNA), expresó su respaldo a la lucha de los pueblos amazónicos y sostuvo que el gobierno “probablemente dirá que la jornada de lucha ha fracasado, pero desde aquí le queremos decir al señor Alan García que es un inquilino en palacio de gobierno y que no es dueño del agua, de los recursos naturales y que no dejaremos que los remate”.

La exigencia del retorno de Alberto Pizango al Perú, libre de amenazas de cárcel para respetar su liderazgo en la negociación de los amazónicos con el régimen, y la exigencia de acabar con la criminalización de la protesta social, son algunas de las demandas de la plataforma de la Jornada Nacional de Lucha que comprendió movilizaciones en Lima y un paro andino amazónico.

La plataforma del Frente Nacional por la Vida y la Soberanía comprende la salida del gabinete de Ministros, exige una política económica que no eche la crisis sobre los hombros de la gente, defienda a los productores nacionales y recupere nuestros recursos naturales, y reclama solución a las demandas de maestros, transportistas, trabajadores de salud, sectores laborales, el agro, regiones y pueblos.

Al hacer uso de la palabra, Ollanta Humala, líder del Partido Nacionalista, señaló que en el país se vive una grave crisis de representación, “Los ciudadanos no creen en sus autoridades ya sea un regidor, un alcalde, congresista o Presidente de la República. Tenemos que cambiar el modelo”, dijo.

Lourdes Huanca, presidenta de la Federación Nacional de Mujeres Campesinas, Artesanas, Indígenas, Nativas y Asalariadas del Perú (FEMUCARINAP), dijo que tanto las mujeres campesinas como los campesinos “estamos en pie de lucha por la seguridad y soberanía alimentaria. Esta es una oportunidad para la unidad de la ciudad y el campo, es urgente esta unidad para defender nuestras tierras.

No podemos perdonarle al gobierno la muerte de nuestros hermanos en Bagua. Articulemos la fuerza entre hombres y mujeres, del campo y la ciudad, porque quieren privatizar el agua, vender nuestros recursos y no podemos permitirlo”, señaló.

El mitin culminó con la quema de ataúdes en los que habían pegado los rostros de los Ministros del régimen y del propio presidente Alan García. Los manifestantes se retiraron pacíficamente seguidos de cerca por un gran contingente de policías, varios a caballo, y una tanqueta antidisturbios, mientras un helicóptero de la Policía volaba en círculos sobre la marcha.