El Movimiento de
Mujeres Trabajadoras y Desempleadas “María Elena Cuadra”
(MEC), organización fundada en 1994 con el objetivo de
impulsar y velar por la incorporación y participación
plena, en condiciones de igualdad, de las mujeres en la
sociedad nicaragüense, acaba de publicar el octavo
diagnóstico “Zona Franca: rostro de mujer”.
El
principal objetivo de este esfuerzo investigativo es
evidenciar el estado de opinión de las mujeres en
relación con las brechas de género y la calidad de los
puestos de trabajo de las mujeres en las maquilas, así
como el cumplimiento de sus derechos consagrados en la
Constitución y las leyes laborales de Nicaragua.
El
diagnóstico analizó a 24 empresas maquiladoras de los
departamentos de Managua, Masaya, Carazo y Rivas, con
una muestra de 3.550 mujeres. En las entrevistas, en las
que participaron 30 encuestadoras mujeres y varios
supervisores de campo, se abordaron diferentes temas
entre los cuales destacan los datos socio-laborales,
producción, normas y salarios, conocimiento sobre
derechos laborales, seguridad social, atención en salud,
maternidad/discriminación, higiene y seguridad laboral,
accidentes laborales y salud ocupacional, violencia
laboral, violencia intrafamiliar e igualdad de
oportunidades.
El
análisis de los avances y retrocesos registrados en el
diagnóstico no abordó el conjunto de las 24 empresas,
sino que se enfocó en los resultados en cada una de
ellas.
Según Javier González, uno de los investigadores
que trabajaron en la elaboración del diagnóstico, “Hay
avances sustanciales en la parte laboral en términos de
seguridad social, estipulación de contratos de trabajo,
y en algunas empresas han mejorado las condiciones de
trabajo. Estos resultados positivos se deben en gran
parte al trabajo desarrollado en términos de
capacitación a las mujeres, ya que más del 80 por ciento
de las encuestadas conoce cuáles son sus derechos
laborales y pelea por ellos”, manifestó González
a Sirel.
Uno de
los aspectos en el que persiste un fuerte deterioro de
las condiciones de las trabajadoras tiene que ver con
salario y el horario de trabajo.
Datos del Banco
Central indican que el costo de la canasta básica ha
alcanzado los 432 dólares, mientras que el salario
mínimo en la maquila es de 119 dólares.
“Para generar algo adicional, las mujeres, que en su
mayoría tienen hijos y son madres solteras, tienen que
trabajar hasta 12 horas diarias. En las entrevistas
–continuó el investigador del MEC–
nos dijeron que las horas extras son ‘solicitadas
cordialmente’, pero que en definitiva son obligatorias y
que tienen que trabajar de dos a tres horas extras
diarias a lo largo de toda la semana”.
Según los resultados de la encuesta, las mujeres
trabajan un promedio de 49,2 horas por semana,
alcanzando un máximo de 68 horas. El 61 por ciento
trabaja horas extras, y de ellas el 74 por ciento hace
entre 5 y 16 horas extras por semana.
“Tenemos también el caso de las jornadas 4x4 que están
previstas en el contrato de trabajo.
Se trata de una
carga laboral muy pesada y hay mujeres que entran a
trabajar a las 7 de la mañana y salen a las 8 o 9 de la
noche, en situación de alto riesgo y con consecuencias
en su salud que todavía no han sido investigadas a
fondo”, explicó González.
Chantaje o acoso sexual
En
el universo de las encuestadas, en las empresas de
Managua, un 6 por ciento denuncia
haber sufrido chantaje o acoso sexual.
Entre las
empresas con mayor índice de violencia las mujeres
señalaron a Sae Tecnotex, de capital coreano, con
el 27,5 por ciento, Mundotes, de capital
estadounidense, y Santa María, de capital
nicaragüense, con el 13 y 10 por ciento respectivamente. En
los cuatro departamentos ese porcentaje sube al 11,5 por
ciento.
En
el tema de violencia física de parte de los superiores
inmediatos, nacionales o extranjeros, las encuestas
indican que casi el 5 por ciento de las mujeres
sufrieron ese tipo de experiencia en Managua,
destacándose nuevamente las empresas Mundotex con
el 15 por ciento y Sae Tecnotex con el 11,5. El
total a nivel de los cuatro departamentos alcanza el 9
por ciento.
En
cuanto a la violencia verbal y presión sicológica, en
Managua un 32 por ciento afirmó haber sufrido ese tipo
de violencia. Entre las empresas señaladas por cometerla
se encuentran las compañías coreanas FID,
Hansae, Istmo Textil y Sae Tecnotex,
con un porcentaje de entre el 51 y el 71,5 por ciento.
Sin embargo, el dato más alto involucra a la empresa
taiwanesa China Unida: 7,7 de cada 10 mujeres
encuestadas denunciaron violencia verbal y acoso
psicológico.
Violencia intrafamiliar
Otro
dato que evidencia la situación muchas veces dramáticas
en que viven las mujeres trabajadoras de la maquila, y
las mujeres en general, se refiere a los casos de
violencia intrafamiliar.
La encuesta reveló que el 14,1
por ciento de las mujeres encuestadas sufrió ese tipo de
violencia, y en el 67 por ciento de los casos fue por
mano de sus esposos o ex cónyuges.
Según declaraciones vertidas a los medios nacionales por
la coordinadora del MEC, licenciada Sandra
Ramos, “Los problemas de violencia que viven las
mujeres en sus casas, repercuten en la productividad de
su trabajo en los centros laborales. La violencia contra
las mujeres es una pandemia que aún no logramos
erradicar en Nicaragua, El Salvador,
Guatemala y Honduras, que son los cuatro
países en donde se impulsará de manera simultánea la
campaña de sensibilización ‘Por una vida sin violencia,
cambia de actitud’, para fortalecer los derechos humanos
de las mujeres”, indicó Ramos.
En los departamentos las
cosas son peores
Si
en el departamento de Managua el informe arroja datos
alarmantes, en los demás departamentos analizados la
situación es peor.
En
las empresas del departamento de Masaya el porcentaje de
mujeres chantajeadas y acosadas sexualmente alcanza el
14,5, mientras que el mismo porcentaje de mujeres ha
sufrido violencia física de parte de sus superiores.
La
empresa taiwanesa Sinonica Industrial, y
la Calipso Apparel de capital de las Islas
Vírgenes Británicas, se apuntan una “medalla de oro”
con el 24 y el 18 por ciento respectivamente.
“En
los departamentos de Masaya, Carazo y Rivas la situación
es más dura – indicó Javier González-. Hay menos
controles por parte del Ministerio del Trabajo que alega
no tiene recursos suficientes, y es difícil para las
organizaciones sindicales y para el MEC tener
incidencia en estas empresas”, concluyó.
El
próximo 8 de marzo, Día internacional de la Mujer, el
MEC presentará públicamente frente a miles de
mujeres trabajadoras los resultados de este diagnóstico.