Trabajadores y trabajadoras del
Sindicato de Empresa Lido SA (SELSA) y
del Sindicato de Trabajadores de la
Industria del Procesamiento de Alimentos
(SITIPA) -ambos afiliados a la
Federación Sindical de Trabajadores
Salvadoreños del Sector Alimentos,
Bebidas, Hoteles, Restaurantes,
Agroindustrias (FESTSSABHRA) y a la
UITA-, realizaron un paro de 24 horas
por el despido de una de trabajadora
acosada sexualmente por el jefe de
Planta.
El pasado viernes 29 de octubre los obreros de la fábrica
LIDO realizaron un paro de 24 horas
exigiendo el reintegro de una
trabajadora despedida por haber
denunciado el acoso laboral y sexual por
parte del jefe de planta José
Heriberto Pacas, el fin de estas
prácticas abusivas y, en general, por
mejoras en las condiciones laborales.
El apoyo fue masivo y la patronal de LIDO y
FAMOLCAS, ambas propiedad del mismo
grupo económico, se vio en la obligación
de negociar con los trabajadores
representados por miembros de las
Directivas de SELSA y SITIPA.
En realidad, todos son trabajadores de LIDO porque se
desempeñan en la misma empresa, pero los
patronos (integrantes de la familia
Molina Martínez) han creado empresas
con nuevos nombres, distintos a la razón
social de LIDO SA de CV para
evadir leyes laborales y tercerizar
tareas.
En la planta LIDO de Boulevard del Ejército se fabrica
pan, repostería y otros productos de
esta reconocida marca. Allí existen dos
sindicatos: el SELSA, con más de
40 años de existencia, que es el titular
del Contrato Colectivo de Trabajo, y el
SITIPA, de reciente creación, que
representa a los trabajadores que la
empresa ha contratado bajo otras razones
sociales para intentar burlar las leyes
laborales, pagar menos y dar menos
prestaciones por el mismo trabajo, como
es el caso de la empresa FAMOLCAS.
Aunque la estrategia de negocios y la política de
subcontratación de la empresa ha
provocado la existencia de estos dos
sindicatos, y aunque algunos argumentan
que existe una dispersión del movimiento
sindical, SELSA y SITIPA
han dado muestras claras de su capacidad
de articulación y de unidad en la
acción, lo que también se expresa en la
organización, pues ambos sindicatos
pertenecen a la misma Federación y a la
misma Internacional.
Acoso
sexual
José Heriberto Pacas,
jefe de planta de LIDO, ha sido
denunciado por acoso sexual a las
trabajadoras, quienes incluso afirman
que recientemente fue despedido un
supervisor de nombre Mauricio por
haber alertado a sus superiores sobre
las actitudes de dicho jefe.
Ana Julia Jiménez de Hilario,
afiliada al SITIPA, fue despedida
el 25 de octubre por no acceder a las
pretensiones de tipo sexual del jefe de
planta, quien por varios meses la acosó,
intentando tocarla, citándola en lugar
solitarios de la planta y haciéndole
propuestas de tipo sexual.
Lejos de corregir la
conducta del acosador, la
empresa intentó cubrirlo
diciendo que sería un mal
precedente si se reinstalara
a la trabajadora |
Ella presentó una denuncia ante el Instituto Salvadoreño para
el Desarrollo de la Mujer (ISDEMU)
y el Ministerio de Trabajo. Este caso
fue también el motivo principal de la
huelga del pasado 29 de octubre, ya que
sus compañeras y compañeros del
Sindicato reaccionaron con indignación
ante su despido.
A partir de esta movilización, la patronal, con la mediación
del Ministerio de Trabajo, abrió una
mesa de diálogo con los sindicatos para
negociar la reinstalación de
la trabajadora despedida y otras
demandas laborales.
Sin embargo, lejos de corregir la conducta del acosador, la
empresa intentó cubrirlo diciendo que
sería un mal precedente si se
reinstalara a la trabajadora. A LIDO
poco parece importarle el infierno que
están viviendo las trabajadoras acosadas
por este jefe, y el impacto que esto
tiene en sus vidas personales y
familiares.
SELSA
y SITIPA han adelantado que
continuarán con la lucha por la
reinstalación de la compañera y por el
respeto irrestricto de los derechos
humanos y laborales de las trabajadoras
y trabajadores de LIDO, ya sean
contratados de manera directa o
tercerizados.
Asimismo, instaron a las autoridades competentes a dar
trámite a las denuncias y castigar a los
responsables del acoso laboral y sexual,
y llamaron a todas las organizaciones
defensoras de los derechos humanos,
especialmente de las mujeres, a
denunciar este grave hecho y demandar
que se haga justicia.