Desde tempranas horas del pasado 9 de julio, en distintos puntos del país,
trabajadores y trabajadoras se movilizaron en masivas marchas y bloqueos de
carreteras para
protestar contra el régimen del Partido Aprista, en un paro nacional que si
bien no resulto total, evidenció el gran descontento de la ciudadanía.
Mario
Huamán,
secretario general de la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP),
calificó la paralización de "contundente y exitosa a nivel nacional",
mientras que el Gobierno señaló que la mayoría de peruanos realizó sus
actividades con normalidad, aunque también admitió que existe descontento
por el alza mundial de los precios de los alimentos.
Al
dirigirse a la multitudinario mitin, Huamán dijo que los reclamos de
este paro, declarado ilegal por el Ministerio de Trabajo, fueron el aumento
de sueldos y la derogatoria de varios decretos privatizadores, entre ellos
los que promueven las inversiones en tierra de las comunidades campesinas y
amazónicas o en zonas declaradas patrimonio histórico o cultural.
Asimismo
rechazó la política de criminalización de la protesta social y demandó
atención a la "agenda agraria y social" para que no se reduzcan los derechos
laborales al tiempo que instó combatir la corrupción gubernamental.
La
protesta se realiza en momentos en que el país registra un crecimiento
económico del 8,3 por ciento, uno de los más altos de la región, y
la inflación del primer
semestre marcó 3,51 por ciento, situación que contrasta con el sueldo mínimo
que reciben los trabajadores 500 nuevos soles (177 dólares aproximadamente)
y la pobreza golpea al 40 por ciento de la población.
En Lima, desde
las 6 de la mañana del pasado 9 de julio empezaron los desplazamientos desde
diferentes distritos de la capital, estudiantes universitarios, trabajadores
y trabajadoras del Estado y del sector privado, gremios sindicales y
campesinos, jubilados y jubiladas, mototaxistas llegaron hasta la Dos de
Mayo para participar en un mitin.
Luis
Reategui Marín,
secretario general del sindicato de Trabajadores Telefónicos, señaló que se
sumó al paro “en defensa de nuestros derechos y por todo lo que esta
sucediendo en el país, las irregularidades, la corrupción. Todos los
gobiernos prometen que van ayudar a la clase trabajadora al pueblo en
general, pero al final no cumplen, por eso paramos. El gobierno debe
rectificar, dejar de ser prepotente”.
“Queremos
papa, queremos maíz, las transnacionales fuera de mi país”, gritaba
Lourdes Huanca, presidenta de la Federación Nacional de Mujeres
Campesinas quien se había sumado a la paralización para protestar por la
política del gobierno que afecta a las comunidades campesinas “porque nos
quiere quitar nuestras tierras, que es lo único que tenemos. Estamos aquí en
pie de lucha, nos tendrán que matar antes de quitarnos las tierras”, agregó.
Desde
diferentes puntos de Lima hombres y mujeres portando banderas multicolores
desfilaban pacíficamente, mientras el tránsito restringido circulaba por las
principales avenidas de Lima.
Las
organizaciones articuladas en “Mujeres Enlazadas” también se sumaron a la
movilización coreando consignas específicas a su género y otras articuladas
a la defensa de la soberanía y respeto de los recursos naturales, el cambio
de la política económica para una justa redistribución de la riqueza y el
acceso a un trabajo digno sin explotación.
Junto a otros
movimientos sociales recorrieron las avenidas céntricas de Lima gritando sus
lemas acompañadas del toque de su batucada, y agitando sus banderolas lilas.
“Alan García, la olla está vacía, nuestros cuerpos violentados,
nuestra vida empobrecida”, “hay oro, hay cobre, y el pueblo sigue pobre”,
“mujeres contra la guerra, mujeres contra el capital, mujeres contra el
machismo contra el terrorismo neoliberal”, “arroz con pollo quiero comer,
con el TLC no voy a poder” fueron algunas de las que se oyeron y que
fueron aplaudidas por personas que observaban el paso de la movilización.
Diana
Miloslavich
de Mujeres Enlazadas, afirmó que paraba porque “hay que decirle basta al
gobierno para que no termine de vender el país, nuestras tierras, nuestros
cuerpos, la Amazonia, hay que decirle basta para que retroceda. El paro es
nacional, si bien Lima es particular, las movilizaciones que se han
realizado desde la 8 de la mañana son enormes y las mujeres también hemos
dicho que este 9 de julio paramos y aquí estamos”.
Mujeres
Enlazadas es organización que se ha constituido después de las Cumbres de
los Pueblos y que reúne a feministas, sindicalistas, mujeres de partidos
políticos que se han planteado seguir trabajando a favor de las mujeres en
nuestro país.
Gioconda
Rodríguez,
coordinadora del movimiento de mujeres ciudadanas del cono norte, también
llegó a la plaza dos de Mayo, quería expresar su descontento por el alza de
costo de vida, el atropello a los campesinos y “lo peor este gobierno esta
permitiendo que las fuerzas armadas de Estados Unidos vengan a
invadir a nuestro país. Si ante todo esto no decimos nada, seria estúpido”,
señaló.
En el interior
del país, cerca de
21 policías resultaron heridos durante el ataque de miles de manifestantes a
la sede del gobierno regional de Madre de Dios, ubicado en la región
suroriental del Perú, según confirmó el representante de la
Defensoría del Pueblo Humberto Cordero, a un medio local.
Uno de
los policías fue herido con una flecha en un brazo y que todos los afectados
se mantienen en situación estable en el Hospital Santa Rosa, de la ciudad de
Puerto Maldonado, capital de Madre de Dios.
La "Ley
de la Selva", aunque aún no ha sido aprobada en el Congreso, fue el
principal motivo de la protesta porque facilitará la venta de tierras de las
comunidades y promoverá la inversión privada en reforestación y
agroforestación.
Por su parte
Celia
Mansilla,
de la Asociación Aurora Vivar, denunció que en La Libertad, a 546 kilómetros
al norte de Lima, a las 2 de la mañana carros de la Sociedad Agrícola Virú
llenos de policías llegaron al local del sindicato y “prácticamente
secuestraron a los dirigentes llevándolos a la comisaría donde los
sometieron a interrogatorio hasta las 6 de la mañana y les hicieron firmar
un documento como si estuvieran requisitoriados y aún tienen a dos
trabajadores sindicalizados recluidos en la cárcel de Viru”.
Mientras
que el sindicato de Camposol fue reprimido a las 6 de la mañana en
momentos que los trabajadores se disponían a salir a la movilización que
habían convocado el sindicato “con bombas lacrimógenas prácticamente los
arrinconaron dentro de su local sindical y apresaron a un trabajador
sindicalizado que hasta el momento no lo han liberado”, explicó.
Mancilla
señaló que han informado a las autoridades de la región y a la Defensoría
del Pueblo para que tome acciones concretas.
La
Asociación Aurora Vivar actualmente trabaja en el desarrollo de la
plataforma de demanda de las mujeres de la agraoindustria en La Libertad e
Ica.
El
Gobierno desplegó unos 100 mil efectivos policiales, con el apoyo de las
Fuerzas Armadas, para garantizar el orden durante el paro nacional y
minimizó el impacto de la protesta, tras haber sido
fuertemente cuestionado por propalar un spot televisivo destinado a agraviar
a las dirigencias gremiales en voz del ex asesor del Servicio Nacional de
Inteligencia, Vladimiro Montesinos, procesado por su participación en
hechos de corrupción y violación a los derechos humanos en el gobierno del
también enjuiciado Alberto Fujimori.