El Sindicato de Trabajadores de Cervecería Paraguaya* (SINTRACERVEPAR) decidió afiliarse a la UITA después de participar en un Taller de la Federación Latinoamericana de Trabajadores de InBev en Buenos Aires y de que gestiones y contactos de la Rel-UITA ayudaran a destrabar la negociación colectiva que llevaba siete años en punto muerto. Tres de sus dirigentes dialogaron con Sirel.

Félix Rivarola

Secretario general adjunto

del SINTRACERVEPAR

“Quisiera expresar mi más profundo agradecimiento a la invitación de la UITA a participar en el Taller de la Federación Latinoamericana de Trabajadores de InBev que se realizó en Buenos Aires en septiembre pasado. Hemos tenido una muy buena repercusión de esa reunión a nivel local, ya que gracias a eso, después de siete años sin ningún avance en relación con la compañía, hemos podido encaminar las negociaciones del Convenio Colectivo con un cambio de actitud muy claro de la empresa, que ahora demuestra un fuerte interés en llegar a acuerdos y en mejorar su relación con el sindicato. Además, gracias a la intervención personal del compañero Gerardo Iglesias pudimos tomar contacto con las demás organizaciones que integran la Federación Latinoamericana de Trabajadores de InBev, lo que es una perspectiva muy interesante para nosotros.

Hugo Zaracho

Secretario general del Sindicato

y delegado permanente en la CUT-Auténtica

“El único problema que nos queda pendiente con la empresa y en el cual la negociación está trancada se refiere al artículo 38 del Convenio que regula las horas extras y el trabajo en domingos y feriados. La empresa quiere quitar este artículo para poder imponer su ‘banco de horas’. Sabemos que en otras plantas hay trabajadores que han caído en eso, y les dicen que cambien un día de semana por un domingo de trabajo, pero no les pagan horas extras ni nada de eso. Nosotros pensamos que es importante descansar y estar con la familia y no trabajar a cualquier ritmo y en cualquier día. En ese sentido, los compañeros vinieron con muchas experiencias nuevas del Taller de Buenos Aires y nos servirán para nuestras opciones aquí en Paraguay”.

“También tenemos pendiente el tema de los trabajadores tercerizados que no tienen salario mínimo, aguinaldo, vacaciones, seguridad social, nada en absoluto, pero sí tienen la ropa de Pilsen como cualquier otro, y proporcionada por la empresa Cervecería Paraguaya. Nosotros creemos que CERVEPAR está omitiendo el pago al seguro social y eso es una estafa contra el Estado y contra el trabajador”.

Jorge Cáceres

Integrante de Sindicato de Trabajadores de Cervecería Paraguaya y secretario de Derechos Humanos de la CUT-Auténtica del Paraguay

“Quiero agregar a lo que han dicho mis compañeros que el sindicato tiene en apelación un juicio por despido ilegal contra el dirigente Amílcar Rojas, ocurrido en 2004, siendo que él estaba protegido por el fuero sindical. En el juicio de Primera Instancia el magistrado falló a favor de la empresa invocando una ley que ya había sido derogada. Para tener una idea de cómo funcionan algunas cosas acá, basta decir que el abogado que defendió a la empresa en este caso fue José Altamirano, hoy Ministro de la Suprema Corte de Justicia. Por supuesto, CERVEPAR sigue trabajando con el estudio del doctor Altamirano. Aquí no hay justicia para todos. También nos resulta difícil denunciar estas cosas porque la empresa tiene una fuerte inversión en publicidad en todos los medios de comunicación, y cada vez que hacemos una denuncia comprobamos con impotencia que no aparece en los medios.

En este momento tenemos un compañero sindicalista que está siendo castigado por la empresa, que lo tiene asignado a una antigua planta desafectada donde las condiciones higiénicas son pésimas, pululan las ratas y otras alimañas, y además está allí completamente solo. Podemos decir hoy que, gracias a la UITA, este tema ya se abordó con la empresa y creemos que estamos en vías de solucionarlo”.

Félix Rivarola, por su parte, agregó que “Para nosotros es una experiencia nueva afiliarnos a una Internacional, y es muy oportuna porque aquí en Paraguay nos sentimos bastante aislados. Durante el Taller en el que participamos en Buenos Aires comprendimos que la UITA es una gran organización reconocida a nivel mundial, y que en muchas oportunidades ha podido ayudar a los trabajadores organizados, ya sea difundiendo sus problemas y conflictos o facilitando la coordinación para el logro de objetivos comunes. Esperamos que nuestra participación en la UITA nos permita también conocer experiencias en otros países, especialmente en la rama cervecera”.