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Para la OIT se trata de
"una dimensión clave para promover la igualdad y combatir la pobreza desde
el mundo del trabajo; y es un requisito para avanzar hacia la equidad de
género".
Los países de América Latina
y el Caribe deben hacerse cargo de las transformaciones en la
sociedad, como la incorporación masiva de las mujeres al mercado laboral,
una medida necesaria para conseguir una conciliación entre trabajo y
familia.
El informe "Trabajo y Familia: Hacia nuevas
formas de conciliación con corresponsabilidad social", laborado por la
Organización Internacional del Trabajo (OIT) y el Programa de
Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), sostiene que "es urgente"
poner en marcha políticas que "permitan a trabajadores y trabajadoras
integrar de mejor manera sus responsabilidades familiares y laborales".
El reporte añade que los gobiernos deben hacerse
cargo de las transformaciones ocurridas en la sociedad, es decir, la
incorporación masiva de las mujeres al mercado de trabajo; la aparición de
nuevas formas de empleo, mucho más precarias e inseguras; y el exceso de
tareas que hoy recaen sobre las familias, sobre todo las de menores
ingresos.
La investigación subraya que se requieren medidas
por parte de los Estados, las empresas, los sindicatos y las propias
familias, "pues en la
actualidad hombres y mujeres comparten el sustento económico de sus hogares,
pero no las responsabilidades del cuidado". "Ello genera una sobrecarga de tareas y tensiones para las
mujeres", agrega.
El informe es la primera investigación que
aborda, con una mirada regional, el tema de la conciliación entre vida
familiar, personal y laboral en América Latina
y el Caribe. Para la OIT se trata de "una dimensión clave
para promover la igualdad y combatir la pobreza desde el mundo del trabajo;
y es un requisito para avanzar hacia la equidad de género".
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