La justicia brasileña autorizó a la filial del grupo italiano Parmalat en este país a acogerse al mecanismo de "recuperación judicial", previsto en la nueva ley de quiebras del país, informó ayer la compañía.

El visto bueno lo dio el juez Alexandre Lazzarini, de la Primera Sala de Quiebras de Sao Paulo, que examinó una petición en ese sentido presentada por la empresa el viernes de la semana pasada.

Parmalat de Brasil estaba desde agosto del año pasado bajo la antigua ley de quiebras a raíz de la crisis provocada por el escándalo financiero del grupo alimentario italiano.

Con la transferencia de la antigua ley de quiebras para el mecanismo de "recuperación judicial", Parmalat queda protegida durante 180 días de posibles ejecuciones judiciales, tales como embargos de bienes, y tendrá un plazo de dos meses para presentar un plan de recuperación financiera.

El sábado vencía el plazo concedido por la justicia brasileña a la filial de Parmalat para pagar un 40 por ciento de sus deudas con los acreedores, cuyo total asciende a 1.800 millones de reales (unos 750 millones de dólares de hoy), plazo que ahora no será tenido en cuenta.

El juez nombró además como administrador judicial del proceso de recuperación judicial de Parmalat al abogado Aclibes Burgarelli, que se desempeñaba como comisario en el proceso de quiebra.

EFE

1 de julio de 2005