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VIOLENCIA | AGRICULTURA
Caen asesinos fugados en Pará
Están en prisión dos de los asesinos de la pareja de
extractivistas José Cláudio Ribeiro da Silva e Maria do Espírito Santo Silva,
acribillados el pasado 24 de mayo en el estado de Pará, al norte de Brasil. El
tercer sospechoso sigue prófugo.
José Rodrigues Moreira
y Lindonjonson Rocha fueron detenidos el pasado domingo 18 en un
megaoperativo ejecutado por más de 60 agentes de diversos Escuadrones de la
Policía Civil y de la Policía Militar.
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José
Rodrigues
y Lindonjonson
Rocha |
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El hacendado Rodrigues
Moreira está acusado de haber ordenado los asesinatos, mientras que
Lindonjonson habría sido uno de los ejecutores junto a Alberto Lopes
Teixeira Nascimento, aún en fuga.
Tras varias solicitudes de
prisión preventiva presentadas por la Policía y el Ministerio Público, y
llamativamente denegadas por Murilo Lemos Simão, el juez que entiende en
la causa, los tres acusados habían logrado huir. Los ahora detenidos fueron
ubicados en un local aislado en plena zona selvática. Al momento de ser
apresados se les incautaron armas cortas y largas.
En opinión del director de
la Policía del Interior, Silvio Maués, “El caso está resuelto”, ya que
se acumuló una serie de indicios y testimonios que identifican claramente a los
tres acusados como autores de los homicidios. “Si el juez niega nuevamente
el procesamiento, el Ministerio Público tendrá que apelar esa decisión ante el
Tribunal de Justicia del estado”, agregó Maués.
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Los
detenidos fueron ubicados en un local aislado en plena zona
selvática. Al momento de ser apresados se les incautaron armas
cortas y largas. |
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El móvil fue
la tierra
Según la investigación
policíaca, en 2009 José Rodrigues había comenzado a comprar predios en la
zona de Praialta Piranheira. Uno de los lotes que codiciaba era el ocupado por
un asentamiento autorizado por el INCRA en el cual vivían José Cláudio
y Maria.
Rodrigues
intentó movilizar al INCRA para que desalojara a los asentados, pero
fracasó. Por lo tanto, comenzó a amenazar a los agricultores, llegando al
extremo de presentarse en la casa de uno de los colonos acompañado con policías
militares.
La negativa generalizada a
abandonar el predio provocó que Rodrigues amenazara públicamente a
José Cláudio, diciendo que él pagaría las consecuencias de todos los
problemas que había provocado.
Pocos días después del
asesinato de la pareja, fue hallado muerto Eremilton Pereira dos Santos,
que también vivía en el mismo asentamiento. El 1 de junio fue asesinado otro
campesino en Eldorado dos Carajás, a pocos kilómetros de donde habían ocurrido
los anteriores homicidios.
Al principio la Policía pensó que se trataba de casos aislados, pero después
admitió que “pudiera ser una táctica de los mismos asesinos para ensuciar la
investigación”.
Las organizaciones
sociales y sindicales vinculadas a la agricultura y a la defensa de los derechos
humanos de Pará y Brasil continúan reclamando una investigación a fondo
de este y los demás casos de asesinatos vinculados a la disputa por la tierra,
así como la detención del tercer asesino aún prófugo.
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