América Latina 
										crece a tasas elevadas y a un ritmo 
										sostenible de 5%, tras un período de 
										recesión, aseguró ayer el economista de 
										la Conferencia de Naciones Unidas sobre 
										Comercio y Desarrollo (Cnuced), Alfredo 
										Calcagno. 
										 
										
										
										Según declaraciones entregadas a la 
										agencia de noticias Notimex, el 
										prestigioso experto y coautor del último 
										informe sobre comercio y desarrollo 
										mundial, la región "crece a un ritmo del 
										5% con la recuperación de los países más 
										grandes como México o Brasil”.
										
										
										 
										
										
										Desde el Cnuced "no percibimos como en 
										otras ocasiones que este crecimiento 
										esté asociado a factores insostenibles 
										como en los últimos años", explicó 
										Calcagno. 
										
										
										La razón se debe a que los flujos de 
										capitales hacia América Latina ya no se 
										basan sobre capitales externos, como 
										ocurría en la década del 90, sino que se 
										sustentan en actividades económicas más 
										sostenibles, destacó el experto.
										
										
										 
										
										
										"En su conjunto (América Latina) tiene 
										un excedente en la cuenta corriente lo 
										que le da mayor margen para seguir 
										creciendo", subrayó el economista de 
										Naciones Unidas, de origen argentino. 
										Sin embargo, a pesar de los altos 
										niveles de producción de la región 
										latinoamericana, el modelo del sistema 
										de crecimiento ha fallado, apuntó 
										Calcagno. "Hay crecimientos y 
										crecimientos. Puede ser incluyente o 
										excluyente, de los que generan empleo o 
										no" explicó el experto, quien añadió que 
										"el crecimiento debe tener inclusión 
										como componente de estrategia de 
										desarrollo". 
										
										
										 
										
										
										Para ello, América Latina requiere una 
										política social "que no sólo se ocupe de 
										las víctimas del desarrollo si no de una 
										política social que no genere esas 
										víctimas", consideró. "La desigualdad es 
										una traba. Hay escuelas económicas que 
										la ven como un elemento indispensable 
										para el desarrollo porque los ricos 
										ahorran y lo invierten", criticó el 
										economista, tras afirmar que las 
										desigualdades sociales existentes en la 
										región serán la causa de los retrasos en 
										el crecimiento de las economías. 
										
										
										
										 
										
										
										El informe publicado este jueves por el 
										Cnuced, que analiza las tendencias 
										macroeconómicas, reflejó también que la 
										coyuntura del crecimiento mundial es 
										buena pero vive una "ralentización" de 
										la economía de los Estados Unidos, una 
										tendencia "que va a continuar en los 
										próximos años". Finalmente, Calcagno 
										alentó a los países productores de 
										materias primas a no basar su economía 
										en la bonanza de sus precios y a centrar 
										sus políticas además en inversión y en 
										desarrollo. A los países en vías de 
										desarrollo, en tanto, los animó a 
										escoger una moneda débil mejor que una 
										fuerte, para proteger las industrias 
										innovadoras y controlar los movimientos 
										de capitales. 
										
										
										Por último, señaló que el uso de aduanas 
										y de protecciones temporales y 
										mesurables puede ayudar al desarrollo si 
										se saben manejar dentro de una política 
										macroeconómica "ofensiva y no 
										defensiva".
										
										
										 
										
										
										Americaeconomía.com
										
										
										1 de setiembre de 2006