México

Más allá de las cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, de las estadísticas maquilladas, de los informes del gobierno que hablan de un crecimiento económico sustentable, está la cruda realidad del pueblo mexicano.

Miles de familias sucumben en la adversidad, los hogares se desmoronan por falta de recursos económicos, los valores se trastocan, los giros negros proliferan, las mafias se posesionan de las necesidades y las adicciones crecen sin medida.

Para muchos mexicanos que viven en una situación precaria no hay salida. La angustia es el refugio de su parálisis. Entrevisté a hombres y mujeres que habitan en las colonias más humildes de la ciudad de México y todos coincidieron en un sentimiento común, ninguno sabía qué hacer para cambiar sus circunstancias: 'Vivimos en un sistema que no ve las necesidades de la gente, que no escucha los reclamos populares, que no se ocupa de crear las condiciones para combatir la pobreza'.

"No tendremos capacidad de recuperación"

Los expertos en el tema también hablaron. Estas son sus opiniones.

'La perspectiva de empleo para 2005 será bastante mala, en congruencia con lo que ha venido ocurriendo en este sexenio', pronosticó la diputada Claudia Esqueda, coordinadora de la Comisión de Trabajo y Previsión Social de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. Precisó: 'No tendremos capacidad de recuperación porque no hay fuentes de empleo'; sin embargo dijo estar esperanzada que al reactivarse la economía internacional podamos tener una mejor proyección. Pese a todo, las esperanzas son pobres porque el gobierno federal ha creado falsas expectativas sobre 'las reformas estructurales'.

Para el exgobernador de Querétaro y coordinador de la Comisión de Trabajo y Previsión Social de la Cámara de Diputados, Enrique Burgos García, más de 11 millones de personas se han incorporado en los últimos años a la economía informal. Las perspectivas se presentarán difíciles en lo referente al crecimiento económico, el cual está intrínsicamente ligado al empleo y al desempleo. Para equilibrar esta situación 'tendríamos la necesidad de generar un millón 200 mil empleos por año'.

Hay que tener claro que lo que realmente genera empleo es la inversión productiva, por lo que deben trabajar conjuntamente el gobierno y el Legislativo, en esta tarea deben impulsar reformas legislativas que apuntalen la competitividad y la calidad, pero además ofrecer seguridad pública al inversionista, ya que si en éste nace la desconfianza y la amenaza de riesgo, no expondrá su inversión; necesitamos brindar certidumbre y agilidad en los trámites fiscales, un empresario planea por lo menos a cinco años y además en materia de impuestos se han tenido muchas variables.

El desempleo lamentablemente va seguir imperando, conocemos las circunstancias y factores que impiden el crecimiento, están identificadas; sin embargo, para encontrar soluciones el gobierno, la Cámara de Diputados y el Senado de la República deberán hacer lo que les corresponda, percatarse de lo nocivo que es el contrabando, un ejemplo son los productos provenientes de la República Popular China que desplazan a muchas industrias, muy especialmente a la textil.

Concluye el diputado Burgos: 'No cabe duda que el tema que produce la mayor parte de las tensiones familiares es el desempleo, perder el empleo repercute en toda la familia. No se pueden pagar colegiaturas, el abono del coche se suspende, incluso comprar lo más elemental para sobrevivir se vuelve imposible, es una situación verdaderamente difícil para la sociedad mexicana. Debemos promover respuestas'.

Fernando Salgado, secretario de Seguridad Social de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), sostiene: 'Urge un acuerdo con los sectores productivos'. En el 2005 y lo que sigue no se cubrirá el rezago de empleos que existe, tenemos un déficit muy alto, aunado a la simulación de las prestaciones sociales y a los bajos salarios que ofrece el mercado laboral. El panorama es muy complicado. El salario mínimo creció en forma muy reducida, incluso por debajo de la inflación que el año pasado fue de 5%; los salarios sólo crecieron 4.5%, quedando este porcentaje por debajo de la inflación; también hubo menos recaudación fiscal y un mercado interno cada vez más reducido; la situación que se vive realmente es critica. La meta de los programas de desarrollo ha quedado alta y, paradójicamente, a su vez baja. La migración a Estados Unidos se agudiza, la razón principal de este fenómeno son los salarios, en Estados Unidos un mexicano gana entre siete y nueve dólares la hora, cantidad semejante a lo que ganaría en México por una jornada completa de trabajo. Los sectores productivos deben de plantear una estrategia, tomar acuerdos que permitan apuntalar la industria nacional. Lo contundente ante las actuales circunstancias sería cerrar las fronteras al contrabando que tanto afecta a la industria textil, hulera y del zapato entre otras; cerrar definitivamente las puertas a la ilegalidad. Debe de tenerse claro que la única forma de competitividad son los salarios, y éstos cada vez se deterioran más; mientras el poder de compra de la clase media adelgaza su poder adquisitivo. Urge un acuerdo.

Una economía con perspectiva social

Por su parte, Harry Gayner, presidente del Frente Revolucionario de la Economía Nacional, dijo a Forum: 'Tenemos un gobierno limosnero con un pueblo pordiosero, que crea una estrategia ilusionista para que los desposeídos de todo le den permanentemente las gracias por darle una solución a su problemática de empleo, aunque ésta signifique únicamente un empleo momentáneo, mediante un crédito para que el ciudadano desprotegido monte su changarro, con un costo de financiamiento de entre el 5 y hasta el 8% mensual, cifras que convierten al gobierno en promotor de la usura; lógicamente el soñador instala su negocio y comienza a tratar de distribuir sus productos, mas como la política monetaria para mantener la inflación en un digito encarece el dinero, con intereses leoninos, no existe ninguna opción hasta el momento para que estas empresas funcionen y el país despegue verdaderamente'.

Para este 2005, augura Gayner, existirán menos fuentes de trabajo, ya que el gobierno actual beneficia exclusivamente al 20 % de la población, marginando al 80 % restante a vivir de la compasión y la caridad del sector privilegiado, todo esto porque falta una política integral, un plan de desarrollo, que hasta el momento y desde hace más de 20 años no se ha dado; el país se ha regido por las variables económicas: freno a la inflación, equilibrio peso-dólar, pago de la deuda interna y externa, reducción del gasto publico, fomento a las exportaciones, juegos de azar financieros, entre otros factores. Estas medidas no han dado resultado alguno, ya que para cambiar realmente las circunstancias actuales tendríamos que aplicar una economía con perspectiva social que logre la libertad económica de todos los mexicanos, y ésta sólo se conseguirá creando y distribuyendo riqueza compartida, mediante la generación de empresas tripartitas, en las sean socios los trabajadores, el empresario y el gobierno; mediante la aplicación de este sistema económico surgirá para el pueblo de México la posibilidad de generar ahorro interno que permita el desarrollo sustentable que todos deseamos.

La conclusión es dramática: la seguridad económica de muchos hogares mexicanos ante este panorama se verá seriamente amenazada. Diversas voces de trabajadores anónimos dijeron a Forum: 'No queremos un cataclismo social, no queremos más incertidumbre, no queremos más víctimas de la negligencia, no queremos sucumbir en la miseria. Los desposeídos del poder queremos que el poder se preocupe por darnos para vivir un poco mejor'.

Carmen Moreno

Argenpress

14 de febrero de 2005