La discriminación salarial hacia las mujeres aumenta. Las mujeres reciben, de media, un salario menor por un trabajo igual o de igual valor. Lejos de atajarse, esta brecha salarial de género ha ido creciendo  en los últimos años.

Los datos del INE (Encuesta de Estructura Salarial 2008, 2009, 2010) son elocuentes: Entre 2008 y 2010 la brecha salarial entre sexos ha aumentado de 5.292 a 5.745 euros y ha subido de 28 a 29,1 puntos porcentuales.

En 2010, la ganancia media anual de los hombres asalariados (25.480 euros) es claramente  superior a la de las mujeres (19.735 euros): los hombres ganan al año en promedio 5.745 euros más.  

Esta diferencia supone que el salario anual de las mujeres equivale al 77,5 por ciento del salario de los hombres o que el salario de los hombres equivale al 129,1 por ciento del de las mujeres. Es decir, el salario promedio de las mujeres debería aumentar el 29,1 por ciento para equipararse con el de los hombres, por un trabajo de igual valor.

La diferente jornada laboral de hombres y mujeres es el factor que más influye en la brecha salarial anual que separa a hombres y mujeres. Si hombres y mujeres asalariados tuvieran el mismo tipo de jornada laboral la brecha salarial que les separa caería un 46 por ciento (2.654 euros menos) de 5.745 a 3.091 euros.

Recordemos que el 23 por ciento de las mujeres asalariadas trabaja a tiempo parcial frente a solo un 4 por ciento de los asalariados masculinos.

El mayor peso del tiempo parcial en el empleo femenino reduce el salario anual promedio de las mujeres frente al de los hombres. Las mujeres son clara mayoría en el empleo asalariado a tiempo parcial (concentran el 80 por ciento) mientras siguen siendo minoría en el empleo asalariado a tiempo completo, suponen el 41 por ciento.

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Más paro. Más recortes. Más empobrecimiento. Menos protección social. Nos dejan sin futuro. Hay culpables. Hay soluciones. 14N, Huelga General. Tarea común de toda la ciudadanía.