La historia de los trabajadores rurales de la Argentina es también la de las mujeres. Las de las trabajadoras en las tareas rurales fuera de su hábitat doméstico, y las de las mujeres rurales en su entorno familiar rural. Trabajadoras a “doble” tiempo, jefas de hogar y único sostén económico, luchadoras por la patria, luchadoras por sus ideas, luchadoras sociales. Impulsoras de la vida, defensoras a ultranza de la familia, subestimadas y menospreciadas por siglos, subalternizadas laboralmente, inferiorizadas políticamente durante muchas décadas. La historia de las trabajadoras rurales argentinas es también la historia de dos defensores a ultranza de sus derechos políticos y sociales como Juan Domingo Perón y Eva Perón, y es también la crónica histórica de los últimos quince años de su gremio, La UATRE y de un grupo de dirigentes gremiales encabezados por Gerónimo Venegas, que sumaron con lucidez a su protagonismo sindical el tantas compañeras de luchas.