La medida, consistente en subir el
cobro de este impuesto de 75 a 230 euros (290
dólares), afectaría la economía de Urabá,
según expertos.
Con esta decisión se busca proteger a los productores
de banano de las antiguas colonias europeas en África,
el Pacífico y el Caribe de la Unión Europea (UE).
Los principales afectados con la decisión serían los
países latinoamericanos, y en especial, Ecuador,
Colombia y Costa Rica, que son los más grandes
exportadores de banano hacia el Viejo Continente.
Productores colombianos
se pronuncian
Los productores colombianos, agremiados en Augura,
calificaron el anuncio de la UE como "mortal" para
esta agroindustria, dado que Europa es el principal
destino del banano colombiano. Allá se envió el 65 por
ciento de los 187 millones de dólares que exportó el
país en el primer semestre del año.
Su preocupación radica en que con el incremento del
arancel se mermará por completo la competitividad de
la fruta colombiana de la que viven 24.000 familias.
América dejaría de
enviar los 3 millones de toneladas de banano
Un estudio del Centro de Economía Internacional,
empresa de consultoría australiana, sostiene que de
convertirse en realidad la propuesta arancelaria de la
Unión Europea en el 2012 América Latina no podrá
enviar los 3 millones de toneladas de banano anuales
que exporta hoy, sino 1,65 millones de toneladas, lo
que representa un descenso del valor de las
exportaciones latinoamericanas cercano a 500 millones
de dólares al año.
Gabriel Barragán, presidente de Asbama, el gremio de
los bananeros del Magdalena, comparte la preocupación
por el anuncio del arancel, pero considera que aún
queda tiempo para hacer el lobby y
revisar
esa decisión.
Cambio del sistema
europeo de importación de banano
La UE decidió cambiar su sistema de importación de
bananos debido a un pleito que tiene con las
comercializadoras de fruta de Estados Unidos, que
operan en América Latina, en especial, Chiquita Brands
International y Dole Food Co.
A partir del 2006 se acaba el sistema actual de cuotas
de importación y se pasa a uno de solo aranceles, cuya
tarifa se debe negociar con los países productores. Si
no se llega a un acuerdo la decisión final la toma la
Organización Mundial de Comercio (OMC).
El anuncio de imponer un arancel de 230 euros lo hizo
ayer el comisario europeo de Comercio, el francés
Pascal Lamy, quien está a punto de abandonar su cargo,
y por este motivo algunos expertos en comercio
aseguran que aún se pueden hacer cambios.
"Dentro de la Unión Europea no un hay acuerdo sobre la
tarifa del arancel, pues algunos países que a
diferencia de Francia no tienen colonias, no están a
favor del alza porque saben que eso afecta a sus
consumidores", sostuvo un experto y agregó que el
replazo de Lamy es un inglés, quien muy probablemente
estará a favor de no aumentar el arancel a un nivel
tan alto.
Impacto social de la
medida
El viceministro de Comercio, Juan Ricardo Ortega, dijo
que un arancel de 230 euros tendría un impacto social
grave en regiones como Urabá, que vienen de sufrir un
proceso de dura violencia y en donde el
restablecimiento del orden ha sido posible, en buena
parte, gracias a la industria bananera.
Sin embargo, se mostró confiando en que se puede
conseguir un resultado favorable para el país, pues en
Bruselas "hay un equipo de negociadores que defenderán
los intereses nacionales".
La posición de Colombia, y de los demás países
latinoamericanos, es mantener el actual arancel de 75
euros (95 dólares) por tonelada. Las ex colonias
europeas, que hoy no pagan arancel, quieren que los
latinoamericanos paguen 275 euros (346 dólares) para
mantener su ventaja competitiva.
Periódico El tiempo
Bogotá, Colombia
28 de octubre de 2004
