Llevan siete meses de haber constituido su Sindicato y ya lograron su primer Convenio Colectivo, que en cada una de sus cláusulas recoge las muchas de las esperadas mejoras en las condiciones de trabajo, así como un merecido incremento de sus sueldos. Para los jóvenes dirigentes del Sindicato de Trabajadores de la Compañía Nacional de Chocolates de Perú SA, la negociación fue un proceso duro que pudieron enfrentar con éxito porque contaban con el respaldo y unidad de su gremio, y con el asesoramiento del sector Alimentos, Bebidas y Afines de la Confederación General de Trabajadores (CGTP-ABA).

Humberto Crisanto

“Ahora hay un mejor trato al personal. Hemos recuperado el respeto. Los jefes muchas veces nos maltrataban, nos humillaban, amenazaban, había hostigamiento, incluso acoso sexual a algunas compañeras. Pero a raíz de la creación del Sindicato han salido a la luz todos estos atropellos”

Marco Alcalde

Walter Cachay

Humberto Crisanto, secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Compañía Nacional de Chocolates de Perú SA, al recordar las acciones realizadas para llamar la atención de los directivos de la empresa, asegura que los plantones que efectuaron diariamente “nos favorecieron porque la empresa se dio cuenta de que contábamos con el respaldo de un importante número de trabajadores y nos llamó para conversar”.

“Empezamos a tomar medidas más fuertes, acudimos a la prensa. Los consejos de nuestros asesores nos ayudaron bastante. Retomamos el diálogo y en las tres últimas reuniones los representantes de la empresa fueron más flexibles; llegamos a un acuerdo que presentamos a la base y la Asamblea, en su mayoría, estuvo de acuerdo”, señaló Crisanto.

“Cuando los trabajadores vieron en nuestra vitrina la carta de la Rel-UITA dirigida a Rubén Fernández, el nuevo gerente, se pusieron muy contentos y orgullosos de saber que también éramos parte de una organización internacional. La gerencia, por su parte, al recibir la carta nos llamó. Esa comunicación nos sirvió para la negociación porque la gerencia general se vio obligada a llamarnos para solucionar el pliego”, sostuvo el secretario general.

Señaló que conocieron a la Rel-UITA a través del sector Alimentos, Bebidas y Afines de la Confederación General de Trabajadores (CGTP-ABA).

“No sabíamos que a nivel internacional existía una organización que velara por nuestros derechos. Antes nuestra fábrica lo era todo, hasta que conocimos a CGTP-ABA. Ahora tenemos otra mirada, y eso nos da una especie de soporte mental y la seguridad de que no estamos solos”, indicó Crisanto.

“Ha sido importante para nosotros la ayuda de Ronald Zavala, Alexander Caballero y Julio Falla porque no sabíamos cómo era el funcionamiento de un sindicato. Han sido importantes sus consejos porque creo que solos no hubiéramos logrado nada”, precisó Crisanto.

Marco Alcalde, secretario de Organización, expresó a Sirel su satisfacción por los logros alcanzados en su primer Pliego: “Somos una organización joven. Nos hemos constituido el 25 de abril de este año por lo que tenemos apenas siete meses de creación, y gracias a la asesoría de ABA hemos salido adelante rápidamente”.

“En estos siete meses hemos constatado la importancia que tiene el trabajo en equipo. Ha habido confianza y sobre todo disciplina. Desde CGTP-ABA nos han inculcado esos valores y nos han servido bastante para llevar adelante esta negociación, porque nosotros no sabíamos nada de trato directo, negociaciones, dirigir una Asamblea; hemos aprendido mucho”, explicó Crisanto.

Walter Cachay Asencio, secretario general adjunto, amplía la información sobre el Sindicato: “Actualmente somos 200 afiliados, en menos de mes y medio logramos afiliar a 180 compañeros. Al Sindicato lo iniciamos 26 trabajadores y de ahí empezamos a capacitarnos y a concienciar a la gente, haciendo Asambleas para tratar de integrar a todos en una sola idea, y eso nos ha servido bastante porque las bases nos han dado bastante apoyo”, señaló.

“Cuando recién formamos el Sindicato el gerente de ese entonces nos dijo que no quería nada con él, pero nuestra decisión fue firme; ahora nuestro reto es prepararnos, capacitarnos más, porque la empresa también estará estudiando qué estrategias seguir y nosotros debemos estar capacitados para hacerles frente. Ellos buscarán diversas formas para desestabilizarnos y debemos estar alertas para evitarlo”, agregó.

Los dirigentes, tuvieron que enfrentar a personas que trataron de boicotear al Sindicato sin éxito, porque los trabajadores afiliados rechazaron los comentarios malintencionados, “no les hicieron caso”, afirmaron.

“Nosotros no sabíamos ni cómo hacer una Asamblea, aprendimos todo desde el principio, cómo hacer llegar el mensaje a las bases, y eso ha sido fundamental. Estamos muy agradecidos a los asesores de ABA que nos acompañaron siempre, incluso hubo días que nos quedamos trabajando con ellos hasta la medianoche, revisando la agenda, la propuesta”, dijo Cachay.

Por su parte, el secretario de Organización, indicó que el segundo Pliego de Reclamos “lo presentaremos el 1 de enero de 2011. El Pliego acordado es por un año y medio. La empresa había hecho un aumento en enero de 2009 que no fue equitativo, ni tomó en cuenta la calificación del personal, tampoco la antigüedad y eso fue un error”.

Las negociaciones determinaron un aumento general diario de 0,85 centavos de dólar y una bolsa de cierre de 274 dólares. Además del beneficio económico también han logrado que la empresa les haga entrega de uniformes y mejores condiciones de trabajo.

“Ahora hay un mejor trato al personal. Hemos recuperado el respeto, los jefes muchas veces nos maltrataban, nos humillaban, amenazaban, había hostigamiento, incluso acoso sexual a algunas compañeras de parte de unos ingenieros y nosotros no sabíamos nada. Pero a raíz de la creación del Sindicato han salido a la luz todos estos atropellos. Nosotros los hemos denunciado y hubo un cambio, incluso han despedido al gerente de Finanzas. El gerente general nos ha dicho que es el inicio del cambio de la compañía, pero éste se ha dado a raíz de que ahora hay un sindicato”, dijo convencido Crisanto.

La Compañía Nacional de Chocolates de Perú SA funciona desde el 1º de febrero de 2007. Es propiedad del Grupo Nacional de Chocolates SA de Colombia, a su vez propiedad de Grupo Antioqueño, el grupo financiero más grande de Colombia, que adquirió los activos de Good Foods SA y con ella la marca Winter´s.