Desde 
mediados de octubre los trabajadores y 
trabajadoras de la trasnacional japonesa 
Ajinomoto, en Limeira, vienen 
movilizándose por mejoras en algunas 
cláusulas sociales de su Convenio 
Colectivo, que vienen siendo postergadas 
desde 2007. Ante la negativa de 
Ajinomoto a entablar una negociación, 
esta mañana el Sindicato de Trabajadores 
de la Industria de la Alimentación (STIA) 
de esa ciudad convocó a la empresa  a la 
Delegación Regional del Trabajo para 
intentar avanzar en la negociación. La 
reunión apenas confirmó la 
intransigencia de esta compañía, cuyo 
nombre literalmente se traduce como “la 
esencia del sabor”, pero que por su 
actitud bien podría agregarse “agriado”.
 
Ajinomoto está presente en Brasil desde 1956; se desempeña en 
los segmentos alimentario, cosmético y 
farmacéutico, de nutrición animal y 
también en el agronegocio. Instalada en 
el estado de São Paulo, la empresa 
cuenta con unidades industriales 
ubicadas en las municipalidades de 
Limeira, Laranjal Paulista, Valparaíso y 
Pederneiras, y ha mantenido desde 
siempre una férrea actitud antisindical 
y una postura irreductible frente a las 
reivindicaciones de sus trabajadores.
 
Sirel 
conversó con Artur Bueno de Camargo, 
presidente de la 
Confederación Nacional de Trabajadores 
de la Industria de la Alimentación (CNTA), 
para conocer los resultados de la 
reunión y las medidas que seguirán.
 
-¿Cuál es la situación actual del 
conflicto en Ajinomoto?
-Luego de que la empresa enviara un oficio al Sindicato el 
pasado viernes 6, donde se pronuncia 
argumentando que las reivindicaciones 
que estamos realizando son una 
estrategia política nuestra y no 
reflejan lo que piensan los 
trabajadores, el STIA presentó 
una nota ante la Delegación Regional de 
Trabajo denunciando los actos 
antisindicales de la empresa, y a su vez 
solicitando que se permita la 
realización de un plebiscito interno, en 
el que participen todos los funcionarios 
de Ajinomoto para poner luz en la 
situación y lograr que la transnacional 
se disponga a negociar de buena fe con 
el Sindicato. La reunión ante la 
autoridad laboral se realizó esta mañana 
y no arrojó resultados positivos.
Ajinomoto continúa con 
su intransigencia y su negativa a 
negociar. Por otra parte, tampoco 
estuvieron de acuerdo en la realización 
del plebiscito, lo que vuelve la 
situación al punto cero.
 
-¿Qué medidas siguen ahora?
-Estaremos reuniendo a la dirección del Sindicato y al 
Departamento Jurídico para evaluar y 
analizar qué camino tomaremos; visto y 
considerando que no hay avances 
comenzaremos a movilizarnos.
 
-Además de esta instancia, se está movilizando a través de 
la UITA una comunicación con la matriz 
de Ajinomoto en Japón…
-Sí, ya dirigimos, junto a Gerardo Iglesias, 
secretario Regional de nuestra 
Internacional, una nota a la directiva 
de la compañía nipona con el fin de dar 
a conocer la situación que estamos 
viviendo en la filial brasileña, esto 
es, la negativa de la empresa a una 
negociación seria. Esperamos que desde
Japón insten a su filial 
a que se avenga a una solución en el 
corto plazo.
