Fernando es
secretario de Acción Sindical Internacional de la Federación
Estatal de Comercio, Hostelería y Turismo de Comisiones
Obreras (FECOHT-CC.OO). Sirel dialogó con él a propósito de
la reciente marcha realizada en Madrid junto a otras
centrales sindicales y organizaciones sociales.
-¿Quiénes
convocaron a esta marcha?
-La
manifestación del sábado 15 en Madrid fue convocada
por la Cumbre Social, una coordinación de la que forman
parte organizaciones sindicales y otras cientos de
organizaciones de la sociedad civil.
Es un colectivo
muy amplio y variopinto que representa a la totalidad de la
sociedad española.
-¿Qué apoyo
recibió la iniciativa?
-Fue una
movilización multitudinaria. Hubo cientos de miles de
manifestantes que marcharon en columnas desde diversos
puntos de Madrid hasta la Plaza de Colón, donde tuvo lugar
la concentración, el acto formal y los diversos discursos de
los diferentes oradores.
-¿Cuáles
fueron los motivos de la marcha?
-Ésta
movilización -como muchas otras que se han realizado en los
últimos tiempos- expresan la oposición y la protesta ante la
política del gobierno del Partido Popular (PP).
Utilizando las
palabras de Ignacio Fernández Toxo, secretario
general de CC.OO, hay una rebelión de las élites que
quieren imponer un cambio arruinando el Estado de bienestar
mediante un proceso de ajuste económico y de ataque a los
derechos de los trabajadores y de los ciudadanos en general.
Ésta ha sido
la más reciente, pero no será la última por que ya se están
preparando nuevas acciones.
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Si,
como dice Rajoy, la realidad lo obliga a hacer
constantemente cosas que no quiere, pues que
dimita, o que haga el referéndum que se está
demandando |
-¿Cuáles son
los principales recortes decididos por el gobierno?
-Esta política
les debe resultar familiar a los trabajadores y trabajadoras
de América Latina, ya que hablamos de un ajuste
estructural o fiscal puro y duro, adaptado a las condiciones
europeas.
Son recortes
en los derechos que producen un importante incremento del
desempleo -además del generado por la propia crisis
económica- que actualmente se ubica por encima del 24 por
ciento.
Se promueve una
desregulación brutal de las relaciones laborales y hay
recortes en materia de educación, de sanidad, en definitiva,
un retroceso generalizado en ámbitos capitales del Estado de
bienestar.
-¿Se está
promoviendo un referéndum contra esta política del PP?
-Sucede que el
Partido Popular se presentó a las elecciones con un programa
que no tiene nada que ver con lo que está haciendo desde que
asumió el gobierno. Desde luego la explicación de Mariano
Rajoy es que se ve obligado por la realidad.
Esa posición no
se sostiene políticamente: si la realidad lo obliga a hacer
constantemente cosas que no quiere, pues que dimita, o que
haga el referéndum que se está demandando donde ponga esta
política a escrutinio de la ciudadanía. Es difícil que lo
haga, pero seguiremos reclamándolo.
-¿Y cuál es
la propuesta estrictamente en el campo sindical?
-Se ha dicho con
toda claridad, incluso en los discursos del sábado pasado,
que la llave de una nueva huelga general la tiene el
gobierno, ya que si no rectifica su política las condiciones
para una nueva huelga general están dadas. Sería la tercera
en dos años.
-También se
está pensando a nivel sindical en acciones europeas
simultáneas…
-Aunque la
situación en el Norte de Europa no es muy comparable
con la de los países mediterráneos e incluso la propia
Francia, sí se va extendiendo en la Confederación
Europea de Sindicatos (CES) la convicción de que éste
no es un problema que afecte a los trabajadores de Grecia,
España e Italia solamente, sino que puede
afectar a todo el Estado de bienestar en Europa.
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Hay
una rebelión de las élites que quieren imponer
un cambio arruinando el Estado de bienestar
mediante un proceso de ajuste económico y de
ataque a los derechos de los trabajadores y de
los ciudadanos en general |
Así, es
posible que durante la próxima reunión de la CES que tendrá
lugar en Madrid el próximo 25 de septiembre, se empiece a
trabajar en una nueva movilización a escala europea, con
formas diferentes según el país y su situación, pero con un
reclamo de fondo común que sería la salvaguarda del Estado
de bienestar.
-¿Qué piensas
que ha logrado cambiar la marcha del sábado?
-Ha tenido un
impacto importante en la convicción cada vez más extendida
de que sólo desde una posición de movilización hay
posibilidades de no sólo frenar esta deriva antidemocrática
del gobierno, sino de recuperar los derechos que se han
recortado.
Desde el punto
de vista sindical ha sido muy importante, ya que toda la
ofensiva contra los derechos de los trabajadores y la
ciudadanía en general que está habiendo en España
como en otros países, se ve acompañada por todo tipo de
acciones para socavar la capacidad de los sindicatos para
defenderse.
Esta
movilización también ha demostrado que las diversas
tendencias sindicales estamos muy unidas y que se puede
contar con nosotros para frenar la política del gobierno.
¿Ese
referéndum tendría efectos vinculantes? ¿Obligaría
legalmente al gobierno?
-No, no
legalmente, pero no cabe duda de que una participación
masiva en una consulta de este tipo tiene efectos políticos.
Actualmente el PP tiene mayoría absoluta en el
Parlamento, pero hace ya bastante tiempo que ha perdido
toda legitimidad social, no ya frente a los votantes de
otros partidos, sino a sus propios votantes.
-Finalmente,
¿cuál sería tu mensaje para la Rel-UITA y los trabajadores y
trabajadoras de América Latina?
-Que tengan la
convicción de que los sindicatos españoles, específicamente
CC.OO que es en nombre de quien puedo hablar, no
vamos a ceder un ápice en nuestra lucha en defensa de los
derechos que intentan arrebatarnos, y ellos por difíciles
que sean las circunstancias.
