Han pasado más de doce meses y aún no se avizora ninguna solución a la dramática situación que vive el Sindicato Único de Trabajadores de Andahuasi. Los trabajadores se encuentran impagos e imposibilitados de administrar la empresa de la cual son socios, por una serie de argucias legales que han emprendido el Grupo Wong, propietario de la azucarera Paramonga, y el grupo Bustamante, liderado por Manuel Bustamante Olivares, quienes se vienen disputando la administración de la compañía.

El litigio va tomando visos de pelea del viejo oeste con grupos armados que llegan al pueblo con la intención de tomar por asalto la empresa. Frente a esta situación Julio Falla, presidente del sector Alimentos, Bebidas y Afines de la Confederación General de Trabajadores (CGTP-ABA) en diálogo con Sirel, ha salido al cruce para expresar su solidaridad con los trabajadores de Andahuasi.

-¿Cuál es la situación actual de los trabajadores de la empresa agraria azucarera Andahuasi S.A.?

-Los trabajadores de la azucarera están en huelga desde el 10 de mayo en demanda del cumplimiento del pago de sus remuneraciones y beneficios sociales, además de los problemas societarios en la empresa Andahuasi, entre otros temas, al margen de ello, el viernes 28 de mayo a las 12 y 30 un contingente de 60 personas armadas, entre las cuales había 20 efectivos policiales uniformados, liderados por Julio Correa; irrumpieron en el centro poblado de Andahuasi, para brindar protección privada al grupo de Eduardo Núñez Cámara, ex presidente de la empresa y responsable de la desaparición de 49 millones de acciones vendidas en forma ilícita al grupo económico Wong.

-¿Cuáles fueron las consecuencias de esta intervención?

-El jefe policial de Huacho, localidad ubicada a 150 Km. al norte de Lima, desconocía el operativo, supuestamente coordinado por Julio Correa y el comisario de Sayán, un poblado a 103 kilómetros al norte de Lima, en el conocido Norte Chico.

El operativo no habría contado con autorización judicial ni orden para uso de armas de fuego de largo alcance; sin embargo, el grupo de civiles armados, entre los cuales había policías vestidos de civil, abrió fuego sorprendiendo  a la población de Andahuasi que vive momentos de gran tensión debido al conflicto social.

A los trabajadores les informaron que el viernes 28 de mayo, a las 7 de la noche, la Jefatura de Huacho, con los comandantes de la Policía Nacional del Perú (PNP), jefes de las ciudades de Huaura, Cruz Blanca y Huacho, realizaban una investigación sumaria al comisario de Sayán, para conocer las razones por las cuales hizo un operativo  policial inconsulto, arriesgando la vida de muchas personas.

-¿Qué acciones va a realizar CGTP-ABA para garantizar los derechos de los trabajadores de la Azucarera Andahuasi ante esta situación?

-Hemos enviado una carta a la Defensoría del Pueblo para hacerle conocer la gravedad de la situación que viven nuestros compañeros, también le hemos hecho saber al presidente del Consejo de Ministros, Velásquez Quesquen. En breve nos reuniremos con el secretario general de la Confederación General de Trabajadores (CGTP), Mario Huaman para diseñar una estrategia de respaldo a nuestros compañeros de Andahuasi.

Consideramos promover una campaña nacional de respaldo para que los grupos económicos de poder que están ansiosos de poner sus manos en Andahuasi sepan que los trabajadores no están solos.

-¿Qué evaluación realizas de este estancado conflicto?

-El tema de fondo es el interés del Grupo Wong y el Grupo Bustamante en apropiarse de la planta, no les interesa que su intromisión afecte la vida de más de siete mil trabajadores y sus familias.

Hace un año el Grupo Wong proyectó que su planta de Paramonga incrementaría sus niveles de producción a 10 mil toneladas de caña por día, y en su afán de ampliar la frontera agrícola para abastecer su planta de caña compró 50 mil acciones para apropiarse de Andahuasi y proveerse de materia prima. Fue una transacción irregular porque no hubo junta general de accionistas para aprobar la venta de ese paquete del accionariado.

Esto choca de frente contra los derechos de los trabajadores, que junto con el apoyo de la población de la región se mantienen firmes en sus reclamos, lo que hace que la situación sea muy tensa actualmente.