Siderlei, presidente de la Confederación Nacional de Trabajadores en las Industrias de la Alimentación, Agroindustrias, Cooperativas de Cereales y Asalariados Rurales (CONTAC), integra desde la pasada semana el Consejo de Desarrollo del Plan Brasil Mayor en representación de los trabajadores de la agroindustria. Sirel dialogó con él para conocer el significado de esta designación.

-¿Qué cargo has asumido exactamente?

-La pasada semana fui juramentado por la presidenta Dilma Rousseff para el Consejo de Desarrollo para el Plan Brasil Mayor, representando a los trabajadores y trabajadoras de la agroindustria.

-¿Qué es ese Consejo?

-Está integrado por representantes de todos los sectores industriales y allí se debatirán los caminos de crecimiento y desarrollo para cada actividad.

-¿Qué significado político tiene esta nominación?

-Es demostrativo de un paso más del gobierno de Dilma hacia una mayor democratización con inclusión, ya que esto abre espacios para que los trabajadores intervengan con propuestas en la discusión y análisis de las medidas y políticas públicas que favorezcan el desarrollo, la mayor y mejor producción de las empresas, y, como consecuencia, en mejores condiciones salariales y laborales.

-¿Para qué se ha creado este Consejo y qué amplitud tiene?

-Hay muchísimos sectores representados como el de automotores, comercio, servicios, salud, etc. Ahí se debatirá sobre todos los problemas de cada uno de ellos, no sólo en los aspectos salariales, sino también cómo mejorar la producción, la exportación, qué tipo de desarrollo quiere la agroindustria y, por supuesto, qué pasa con los trabajadores. 

En la medida en que el gobierno está apoyando financieramente el desarrollo de las empresas, es lógico que tenga que haber una contrapartida para los trabajadores y eso también lo vamos a discutir.

Este Consejo también es una suerte de protección para que la crisis mundial no afecte más fuertemente a Brasil. Se anunciaron algunas medidas posibles como, por ejemplo, reducir los aportes patronales al Estado sin disminución de salarios, para lo cual se analizan diversas opciones.

Finalmente, es necesario debatir qué desarrollo se quiere y para quién.