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La semana comenzó
con la paralización total de actividades del Centro de Distribución (CD) que
posee Seara-Marfrig en Campinas, debido a la falta de acuerdo entre los
trabajadores y la gerencia de la compañía en San Pablo.
En diálogo con
Sirel, Marcos Araújo, presidente del Sindicato de Trabajadores de la
Industria de la Alimentación de Campinas (SITAC), que representa a los
trabajadores y trabajadoras del Centro de Distribución en esa localidad
paulista, comentó que esta empresa pertenecía a Seara y que fue vendida a
Marfrig.
“Siempre se vive
un clima de incertidumbre hasta que asumen los nuevos dueños. En este caso
Marfrig mantuvo las condiciones de los trabajadores, pero al mismo tiempo
fue dilatando el proceso de negociación colectiva que se da todos los años en
abril, y hasta ahora no había presentado una propuesta de reajuste.
Finalmente
-continuó el dirigente- realizó una oferta la semana pasada que no alcanza las
expectativas de los trabajadores que, ayer 22, cansados de tantas excusas
dilatorias votaron la huelga general por tiempo indeterminado hasta que Seara-Marfrig
reconsidere su propuesta”, enfatizó.
Según Araújo,
la paralización es total desde el último turno. Hay 300 toneladas en
productos de la compañía que no llegarán a los supermercados este lunes 23,
entre alimentos envasados y carne.
“La Gerencia
se comunicó conmigo esta mañana para tratar de subsanar la situación. Quedamos
en que el SITAC reunirá a los trabajadores en Asamblea para acercar las
propuestas y tratar de llegar a un acuerdo satisfactorio para todos”.
Los trabajadores
reivindican un 10 por ciento de reajuste salarial, incremento del vale
alimentación y de la canasta básica, para que los valores sean equivalentes a
los de los trabajadores de las fábricas que tiene la empresa en otras ciudades
de San Pablo.
“Los trabajadores
quieren equiparar los beneficios a nivel de la empresa. y estaremos aguardando
el resultado de las reuniones de hoy”, concluyó el dirigente.
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