Espaldarazo legal a los sindicatos SELSA y SITIPA en su lucha por el fin de la discriminación laboral y las condiciones salariales diferenciadas en el Grupo LIDO.

La empresa salvadoreña LIDO S.A. sufrió un duro revés en su intento de disolver por vía judicial al Sindicato de la  Empresa LIDO S.A. (SELSA) el que realizó dos huelgas en junio 2011 y marzo 2012 para intentar mejoras salariales en las empresas LIDO S.A. y FAMOLCAS S.A. elaboradoras de conocidos productos panificados con la marca LIDO.

El Juzgado Tercero de lo Laboral de la ciudad de San Salvador, en una resolución del 8 de octubre declaró “No ha lugar” la pretensión de la empresa de disolver el sindicato acusándolo de promover huelgas ilegales. En su resolución, el Juez realiza una detallada argumentación mostrando cómo el abogado de la patronal “no probó en debida forma el sustrato fáctico que encierra la pretensión”.

La gran pregunta en este caso, es cuanto han gastado las empresas del Grupo LIDO en procesos legales que no tienen ninguna perspectiva de éxito. A ello hay que sumarle la mala administración y que el despilfarro de recursos en disputas judiciales no solo abarcan el ámbito laboral, sino se extiende a reyertas familiares.

Durante la negociación colectiva que se desarrolló a principios de 2012, los representantes de LIDO S.A. expusieron su necesidad de recuperar 5 millones de dólares que no habían sido cancelados por otras empresas del grupo familiar. Esto muestra que el origen del congelamiento de salarios para el período 2010-2014, está en las disputas intestinas de la familia Molina Martínez.

Lo lamentable, es que mientras la familia propietaria de la marca LIDO y de diversas empresas se sumerge en duras disputas invirtiendo miles de dólares en demandas y contrademandas, las trabajadoras y trabajadores del Grupo siguen teniendo salarios indecentes, condiciones  de trabajo deplorables y víctimas de un sistema de subcontratación que facilita el pago de salarios diferenciados por el mismo trabajo.

Esta realidad la reconoce el juez actuante en su fallo cuando dice: las “señoras María Isabel Oporto Jacinto y Maritza Elizabeth Chávez, (…) quienes han manifestado que laboraban para FOMULCA S.A. de C.V. y para la sociedad FAMOLCAS S.A. de C.V. respectivamente, y en el presente caso no se ha establecido la relación o vínculo de estas con la sociedad LIDO S.A. de C.V., empresa últimamente mencionada a la cual pertenece el sindicato demandado, ya que las testigos en las deposiciones antes mencionadas, únicamente mencionan que el vínculo existente entre dichas sociedades es que se encuentran en el mismo espacio físico y la segunda de las testigos en su deposición agrega que cada sociedad tiene el personal asignado y que no obstante expresar la deponente que los jefes de la sociedad LIDO pueden darles órdenes a los de la sociedad FAMOLCAS y viceversa y que ambos personales realizan las mismas labores y que esto le consta porque todo el personal es contratado como servicios varios y que ella se encuentra laborando para la sociedad FAMOLCAS S.A. de C.V.”

El fallo es un importante espaldarazo a la lucha de los trabajadores de LIDO y mientras esta se desarrolla, habrá que prestar atención a que las pugnas internas de la familia Molina Martínez no desestabilicen la economía de las empresas, poniendo en peligro el trabajo de su personal.

El sindicato SELSA y el sindicato SITIPA -que representa a trabajadores subcontratados de LIDO- son miembros de la Federación del Alimento FESTSSABHRA, afiliada internacionalmente a la UITA.