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Los
testimonios sobre la masacre de Changuinola están a flor de
piel y surgen en cualquier conversación, en cualquier
esquina. La población comienza a integrar la fecha del 8 de
julio como un día a recordar en la tradición popular.
Morales es
integrante del Sindicato de Trabajadores de la Industria del
Banano (SITRAIABANA). Sirel conversó con él sobre la
represión que sufrió la población de Bocas del Toro y el
comportamiento digno de una comunidad en lucha.
-¿Cómo se desarrollaron los acontecimientos el día de la
represión?
-Nosotros anticipamos los hechos ocurridos en Bocas del
Toro, porque cuando el gobierno difundió la reforma de la
legislación laboral nosotros expresamos nuestro rechazo,
porque esta Ley 30 va en contra de la masa obrera, del
ambiente y de la población panameña en general.
El desdén con que este gobierno trató a los trabajadores en
este tema llevó a esta situación catastrófica vivida el
pasado día 8 de julio, donde fallecieron varios
trabajadores, tres de los cuales estamos enterrando hoy
(domingo 18) y otros tantos quedaron gravemente heridos. Hay
varios compañeros que quedaron ciegos por los perdigones
disparados por los antimotines que llegaron desde diversas
provincias.
Estos compañeros estaban protestando pacíficamente por un
derecho consagrado por las leyes de la República, y la
represión fue brutal. Por eso el movimiento sindical está
luchando para que el gobierno derogue definitivamente la Ley
30, que atenta contra los más humildes y que es claramente
anticonstitucional.
-¿Estuviste allí cuando se desató la represión?
-Sí, y el momento más difícil fue cuando comenzaron a tirar
bombas lacrimógenas, perdigones y luego empezaron a disparar
balas de verdad. El toque de queda que se instauró luego del
8 de julio no es propiamente un toque de recoger, y sí una
amenaza de muerte contra la población de Bocas del Toro.
Más de 1.500 efectivos antimotines fueron desplegados por
las calles de Changuinola con la orden de matar a cualquiera
que manifestase en contra del gobierno.
-¿Qué dice el gobierno en este momento sobre el asunto?
-Luego de los acontecimientos el gobierno se ha desplazado
hasta Bocas del Toro, y andan repartiendo comida y
bicicletas, pero la población los ha rechazado porque no
estamos en venta, y mucho menos por una bolsa de comida.
Nosotros exigimos que se derogue la Ley y que regrese la paz
a nuestra provincia.
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