Veinte millones de mexicanos padecen de
desnutrición, mientras 300.000 familias se encuentran en
situación de hambre, denunció hoy el diputado del Partido
Revolucionario Institucional, Alberto Jiménez.
La pobreza extrema se ha convertido en uno de los
principales problemas que México tiene que resolver, por lo
cual urge establecer políticas y programas que permitan
aumentar la producción agropecuaria, sostuvo.
En ese sentido, el legislador anunció que la Comisión de
Agricultura y Ganadería de la Cámara Baja propondrá a las
secretarías de Desarrollo Social y Agricultura, así como a
la Comisión Nacional de Pueblos Indígenas, impulsar la
autoproducción de alimentos.
El gobierno destina hoy a programas relacionados con el
combate a la pobreza apenas un cuatro por ciento del
producto interno bruto, lamentó Jiménez y señaló que en
países desarrollados esa proporción llega a ser casi cuatro
veces superior.
El empobrecimiento que vive el país es básicamente rural y
afecta en lo fundamental a mujeres y niños, fustigó el
diputado por el PRI, quien consideró que éste es un problema
requerido de urgente solución y ante el cual el Estado debe
asumir su responsabilidad.
Argenpress
14 de febrero de 2005
