Brasil │DERECHOS HUMANOS 

Sección: REFORMA AGRARIA

Con Udo Wahbrink

Aunque yo muera,

esta lucha continuará

 

Udo nació hace 46 años en Rio Grande do Sul. Tiene dos hijos y lleva 28 años viviendo en Rondonia. Es presidente del Sindicato de Trabajadores Rurales de los municipios de Vilhena y Chupinguaia, afiliado a la Confederación Nacional de Trabajadores en la Agricultura (CONTAG). A fines de abril pasado fue detenido mientras lo desalojaban -junto a centenares de familias- de tierras en disputa ocupadas desde hace más de 20 años. Recientemente liberado,  relató para Sirel sus meses de prisión y, sobre todo, las razones de su lucha indoblegable.

 

 

-¿Cuál fueron los hechos por los cuales te recluyeron en prisión?

-El fondo del asunto es una disputa de tierras públicas. Fuimos a prisión porque aquí la justicia apoya a quien tiene dinero, a los “fazendeiros”. Nuestro Sindicato actúa en los municipios de Vilhena y Chupinguaia donde tenemos 170 mil hectáreas de tierra fiscal.

 

En una parte de ellas hay miles de familias trabajadoras rurales algunas de las cuales viven allí desde hace 20 años, otras un poco menos. Ahora que el área ha sido desbravada, que se cultiva, que se han construido casas y galpones, aguadas y demás, aparece la justicia ordenando la destrucción de todo eso para entregarle las tierras a supuestos dueños que son los mismos fazendeiros de siempre.

 

-¿Por qué supuestos dueños?

-Porque ellos recibieron esas tierras durante la dictadura militar con varias condiciones cuyo incumplimiento anulaba la posesión.

 

Hace más de 30 años que el INCRA(1) debería haber recuperado esas tierras formalmente, pero ellos se valen de que no se hizo y de una justicia corrupta para expulsarnos de nuestros hogares.

A mí me dijeron que mi muerte no sería por bala, sino por “algún accidente”. Igualmente, en una oportunidad me tiraron tres tiros pero no acertaron. A partir de ese momento, como la justicia y la Policía no me protegen, comencé a llevar mi arma legal conmigo.

 

-¿Y qué pasó contigo?

-Como presidente del Sindicato de Trabajadores en la Agricultura yo estaba organizando estas personas, participando en contactos nacionales y negociaciones para demarcar esas tierras para las familias, por lo que ya desde hace tiempo me torné en una amenaza para los fazendeiros.

 

A partir de ahí quedé marcado para morir, y me lo hicieron saber en varias oportunidades. Además, no fui el único amenazado. A mí me dijeron que mi muerte no sería por bala, sino por “algún accidente”. Igualmente, en una oportunidad me tiraron tres tiros pero no acertaron. A partir de ese momento, como la justicia y la Policía no me protegen, comencé a llevar mi arma legal conmigo.

 

-¿Quiénes son los que amenazan?

-Pistoleros al mando de los fazendeiros. Tienen absoluta impunidad. Andan junto a la Policía, incluso tenemos los nombres de los policías que proveen de armas y municiones a estos mercenarios.

 

Y ellos no se detienen. Desde el mismo día que salí de la cárcel comencé a ser seguido por varios de ellos.

 

-¿Ahora te están siguiendo?

-Ahora mismo, sí. Están ahí, fuera del Sindicato. Pero esta es una lucha que sólo va acabar hasta cuando haya una justicia que no sea la del rico en detrimento del pobre. Incluso si me matan, la lucha va a seguir

 

-¿Por qué te mandaron a la cárcel?

-Después que nos desalojaron nosotros volvimos a entrar en los predios, y se produjeron nuevos incidentes. Fue violento. Los policías mataron los animales a tiros, amenazaban a los niños con sus armas para que les dijeran dónde estaban sus padres.

 

A mí me arrestaron con el arma encima. De nada valió que tuviese documentos del arma, ya que es de mi propiedad desde hace más de 20 años aunque nunca la usé.

 

-¿Cómo fue el arresto?

-Fue muy duro. Me golpearon mucho durante dos días, sobre todo en la cabeza. Me obligaron a quedarme tirado en el piso de la celda boca abajo. Creí que la cabeza me iba a explotar. Tanto me golpearon que perdí parte de la visión. Pasé más de un mes con fiebre sin recibir ningún medicamento y comencé a perder el cabello. Adelgacé 20 kilos. Quedé en un estado miserable.

 

-¿Cómo te quitabas la fiebre?

-Me ponía debajo de la ducha fría. No podía hacer otra cosa, pero apenas me sostenía de pie. Hay agentes penitenciaros que recibían dinero para darme malos tratos, humillarme, amenazarme de muerte de manera constante. La tortura psicológica era permanente. Fue muy duro, y espero que haya sido útil para llamar la atención sobre nuestra justa lucha.

 

Agradezco mucho la preocupación de la Rel-UITA que le dio difusión internacional a nuestro caso. Quien lucha por la gente simple, por los más débiles, merece respeto, y eso nunca cambiará. Tenemos que seguir mostrando fuerza desde nuestra organización nacional e internacional. 

Esta lucha sólo va acabar cuando haya una justicia que no sea la del rico en detrimento del pobre

 

-Finalmente el Supremo Tribunal de Justicia te liberó hace 15 días…

-Sí, gracias a la constancia de la CUT y la CONTAG fui liberado. Pero ese mismo día el fiscal de este municipio formalizó una nueva denuncia en la cual me acusa de varios delitos y pide que me condenen a 18 años de cárcel.

 

-¿Cuál es su nombre?

-Se llama Elíseo... no recuerdo su apellido. Se trata de un fiscal corrupto que hace pocos años fue acusado de pederasta pero la Policía nunca investigó realmente el caso. Está al servicio de los fazendeiros.

 

-¿Entonces continuarás en la lucha?

-Ya estoy en la lucha. Salí de prisión y ya estoy participando en las reuniones del Sindicato, pero la jueza que me mandó a la cárcel dictó una orden de restricción en mi contra, de tal forma que no puedo salir del municipio, no puedo participar en reuniones fuera de aquí.

 

Debería concurrir al Ministerio Público Federal mañana para dar mi testimonio sobre todo esto, pero no me permiten viajar. Debo concurrir a una reunión en Porto Velho, pero no me lo permiten. Están tratando de desanimarme, de aislarme, de trabarme todo lo que puedan, pero no lo van a conseguir(2).

 

Antes de terminar, quiero enviar un saludo sindical a todos y todas en la Rel-UITA. Sé que puedo contar con ellos como ellos pueden contar conmigo.

 

  

    Udo en la Conferencia Mundial del Sector Lácteo de la UITA. Buenos Aires 2010

Rel-UITA

                  3 de diciembre de 2012

 

 

 

 

Fotos: CONTAG

 

1 - Instituto Nacional de Colonización y Reforma Agraria.

2 - Finalmente, Udo pudo reunirse el jueves 29 con el Equipo Técnico Federal (ETF), responsable del Programa de Defensores de los Derechos Humanos, instaurado por la Secretaría de Derechos Humanos de la Presidencia de la República.

 

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