En la Declaración Universal de los Derechos Humanos
se establece el primer compromiso jurídico, ético
global de la Humanidad, por la dignidad y la
igualdad de todos los seres humanos.
La Propuesta
de Declaración se sometió a votación de la Asamblea
General el 10 de diciembre del año 1948, hace 60
años, dando un salto positivo y cualitativo en la
marcha de la Humanidad.
Fue aprobada en un momento difícil para la humanidad
entera, después de los horrores de dos Guerras
Mundiales en el mismo siglo XX, que dejaron enormes
heridas en la conciencia, que significó laceración
por el Holocausto, junto al fascismo mussoliniano,
todavía con los olores al hongo atómico y el mayor
genocidio de la historia, con la división entre el
mundo capitalista y el socialista, dividido además
por el colonialismo y sacudido por la desigualdad.
Del dicho al hecho hay mucho trecho
En el año de conmemoración, todo el año 2008, el día
3 de Marzo, la Alta Comisionada de la Organización
de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos,
Louise Arbour, al inaugurar la séptima sesión
dirigiéndose al Consejo de Derechos Humanos de la
ONU expresó lo siguiente:
“Los compromisos solemnes expresados por
la ratificación masiva de numerosos
tratados internacionales sobre Derechos
Humanos…. han encontrado poco eco en la
realidad de aquellos que tienen hambre o
que tienen miedo”,
“Los progresos tecnológicos, los avances
científicos y la mayor riqueza de las
naciones benefician inmensamente a un
número muy pequeño de personas y
traicionan los ideales de igualdad y de
no discriminación expresados en la
Declaración Universal “agregó la Alta
comisionada. |
Hablar de la actualidad y realidad de los derechos
humanos, es referirse a una historia de lucha y
protesta de los pueblos por la justicia social y por
la dignificación humana, sobre todo para aquellos
que se ven privados de lo más indispensable para una
existencia digna, o no tienen la menor posibilidad
de participar en la vida política y por ende en la
transformación socioeconómica de su país.
Son
muchas las voces que se han levantado: el obrero
reclamando salario justo y seguridad ocupacional, el
campesino clamando por tierra, las etnias y afro
descendientes defendiendo su cultura y tradiciones,
la mujer reclamando igualdad, el preso que pide
trato humano, el niño y niña su derecho a estudiar,
los pueblos queriendo ganar democracia defendiendo
su derecho al desarrollo, a la autodeterminación, es
doloroso expresarlo y aceptarlo, pero la realización
plena de nuestros derechos sigue siendo una
aspiración de la humanidad.
Los múltiples Tratados, Pactos, Convenciones
Internacionales a veces sin reconocimiento por
algunos países y por todos guardados en el baúl de
los recuerdos…. sólo son utilizados para exigirlos a
los demás cuando les conviene pero nunca
comprometiéndose con ellos, como expresó el
Presidente de Amnistía Internacional-Chile.
En éstos 60 años de la Declaración Universal de los
Derechos Humanos, rendimos homenaje a los
visionarios y propulsores de su redacción
principalmente al francés René Bassin, Premio
Nobel de la Paz, Padre de la Declaración y del
moderno Derecho Internacional de Derechos Humanos;
asimismo, a los Defensores de los Derechos Humanos
en todo el mundo.
La lucha sigue….
La RED Latinoamericana de Educación por la Paz y los
Derechos Humanos de CEAAL ha luchado y lucha por la vigencia real de los
Derechos Humanos. Es nuestro deber garantizar que
los Derechos Humanos consignados en la Declaración
Universal se hagan efectivos en la realidad,
sean conocidos, comprendidos y disfrutados por todos
y todas y cada uno, popularizar el conocimiento, de
cuáles son nuestros Derechos; pero importante
también es saber denunciar y luchar contra la
impunidad.
Esta
lucha no se termina, hay que combatir contra de los
grandes genocidios, guerras impuestas, muertes de
por hambruna, generadas tanto por la concentración
del PODER, como por la concentración de la RIQUEZA.
Derechos Humanos del Siglo XXI
Sin negar ni descalificar la vigencia de la
Declaración Universal de los Derechos Humanos, de
los instrumentos Nacionales e Internacionales de
Protección de los Derechos Humanos existentes, es
necesario, por el contrario, actualizarla y
complementar los derechos ya adquiridos desde una
nueva perspectiva, la de la ciudadanía
participativa.
Se ha elaborado una propuesta, aún en discusión, un
instrumento programático de la sociedad civil
organizada internacional, dirigido a los actores
estatales y a otros institucionalizados para la
cristalización de los derechos humanos en el nuevo
milenio, consensuado su nombre de Declaración
Universal de Derechos Humanos Emergentes
(DUDHE) en noviembre del 2007.
La idea es que la Sociedad Civil Organizada
desempeña un papel fundamental a la hora de afrontar
retos sociales, políticos y tecnológicos que plantea
la Sociedad Globalizada en el siglo XXI. La
Declaración Universal de Derechos Humanos Emergentes
es un instrumento adicional para facilitar el
conocimiento y el debate de los Derechos Humanos.
Este documento contempla dos tipos de derechos, los
que han estado hasta ahora “sumergidos” y por lo
tanto necesitan emerger y otros que hasta ahora no
han sido contemplados ya que han surgido de las
transformaciones en las sociedades que el cambio
tecnológico y la globalización han comportado.
Pretende salir de la dicotomía histórica en la que
se han dividido los derechos humanos: civiles y
políticos, económicos, sociales y culturales,
económicos, sociales y culturales. A la vez que
pretende superar las contradicciones entre los
derechos colectivos y los individuales.
La DUDHE
incorpora a más de 40 Derechos Humanos Emergentes
divididos en 6 Títulos cuyo hilo conductor es la
DEMOCRACIA. En éste Siglo XXI está demostrado la
necesidad de profundización de nuestro Sistema
Democrático haciendo incidencia en la mejora de su
calidad y en la garantía de sus preceptos.
Hasta hoy la DUDHE es solo un punto de
partida en un proceso normativo amplio que aún no ha
terminado, debe de constituirse en una guía
reivindicativa de una Sociedad Civil comprometida
para alcanzar un mundo justo y solidario.
¡DERECHO QUE NO SE DEFIENDE ES
DERECHO QUE SE PIERDE!
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