En el sector
de bebidas PepsiCO
tomó la
delantera y se diversificó hacia otras actividades relacionadas, presentando en
la actualidad un portafolio más amplio que su archi competidora Coca Cola
Company, que ahora parece despertar y entrar en acción.
Coca Cola FEMSA
(KOF) es el embotellador líder de las marcas de Coca Cola en el
mundo. Según su página en Internet, 52 por ciento es propiedad de Fomento
Económico Mexicano SA de CV (FEMSA), 30,6 por ciento de subsidiarias de
The
Coca-Cola Company
y 17,4 por ciento propiedad de inversionistas públicos.
FEMSA
ingresó
al ruedo mayor cuando en 2003 adquirió el 100 por ciento de PANAMCO. De
esta forma salió de México y hoy registra presencia en nueve países de
América Latina.
En 2007, con
la adquisición del segundo mayor productor de jugos en México, Jugos
del Valle, inició operaciones en el segmento de bebidas no carbonatadas.
De esta forma
FEMSA, y claro está, Coca Cola Company, iniciaron una política de
“integración horizontal” que consiste en adquirir o fusionarse con empresas de
la misma industria con la finalidad de incrementar su gama de productos y,
asimismo, obtener ventajas competitivas en el mercado.
De
Panamá a México
El año
pasado FEMSA redobló la apuesta ingresando al sector lechero con la
compra del Grupo Industrial Lácteas (Estrella Azul), el mayor grupo
lácteo de Panamá que en 2010 registró ingresos por 140,9 millones de dólares.
Hace algunas
semanas FEMSA fue nuevamente noticia al comprar la mexicana Santa
Clara, que procesa unos 200 mil litros de leche diarios, de los cuales 75
por ciento se destina a leche fluida.
México es el
octavo consumidor global de leche y registra ventas anuales por unos 7.000
millones de dólares.
El mercado lo disputa un reducido número de empresas: de cada diez vasos de
leche que se beben diariamente en el país, cinco provienen de la empresa Lala,
tres de Alpura y dos del resto de las marcas.
Según la
Asociación Nacional de Ganaderos y Lecheros (ANGLAC), en México se
producen anualmente 10.700 millones de litros de leche, y las importaciones
̶̶ principalmente de Estados Unidos donde la producción es subsidiada ̶̶
representan cerca del 31 por ciento del consumo nacional.
La demanda
anual asciende a los 13.500 millones de litros y tan solo en 2011 se
importaron 226.779 toneladas de leche en polvo, consigna la ANGLAC.
El
NAFTA y la lechería
Como en otros
países, el productor lechero mexicano está trabajando a pérdida. “No es
suficiente lo que reciben los productores del sector por la venta al gobierno
federal y a los industriales que, en el mejor de los casos, asciende a 5,62
pesos por litro, cuando los costos de producción son de 6,30 pesos"(1).
De cada diez vasos de leche que se beben diariamente en México,
cinco provienen de la empresa Lala, tres de Alpura y dos del resto
de las marcas. |
México
afronta
una sequía tenaz y debe importar buena parte de las materias primas utilizadas
para alimentar el ganado; el costo de la “ración” representa 70 por ciento del
total.
Según
Armado Paredes Arroyo Loza, presidente del Grupo APAL (productora de
leche), “Tiempo atrás la tonelada de maíz estuvo en 3 mil pesos, y en los
últimos tres años hubo un incremento de 200 por ciento”.
La crisis es
tan aguerrida que se estima que de las 200 mil unidades de producción que
existen en el país a finales de 2012 habrán desaparecido unas 50 mil, y como
consecuencia de la sequía se dejarán de producir entre 500 mil y un millón de
litros/día(2).
¿Cómo se llega a esta situación?
Álvaro
González,
dirigente del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche, afirma que
“la crisis alimentaria en México se inició desde hace 18 años con la
firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) que
privilegió a la industria láctea y la benefició con la condonación del impuesto
arancelario por más de 4 mil millones de dólares, durante los 14 años del
periodo de desregulación. Además, abrió la importación de leche subsidiada de
origen”.
PepsiCO
La compañía
continúa
creciendo en el sector
lácteo
y
ahora venderá yogur en Estados Unidos
en sociedad
con una empresa alemana. |
“Es que
México es el país con la mayor importación láctea del mundo, debido al Tratado
de Libre Comercio con América del Norte”,
advierte Vicente Gómez Cobo, presidente de la ANGLAC.
Volviendo a
FEMSA y a su última adquisición, Santa Clara, los 200 mil litros
diarios de producción de leche poco debe preocupar a sus competidores, aunque no
es menos cierto que el Grupo tiene poder de fuego para apoderarse de otras
empresas.
Otro
escenario posible es que FEMSA importe lácteos desde Estados Unidos,
de donde en los primero seis meses de 2012 provino el 72,90 por ciento del total
de las importaciones(3).
De esta manera podría abastecer a las casi 10 mil sucursales OXXO de
su propiedad, la cadena de tiendas de conveniencia (superficies con menos de 500
m², con un horario comercial superior a las 18 horas) más grande de México.
El tiempo lo dirá.
La realidad
muestra que ante el fenómeno de la saturación de mercados, las principales
transnacionales buscan otros segmentos y poco a poco se van quedando con todo.
Los huevos en
varias canastas, hasta que las canastas y todos los huevos, estén en manos de
una misma transnacional. Al parecer, no falta mucho.