Daniel Elías
es secretario general de la seccional Esperanza de la Asociación de Trabajadores
de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA). Con él conversamos
para saber cómo ha evolucionado el relacionamiento con el Grupo Gloria.
-¿Cuánto
hace que llegó el Grupo Gloria?
-Aproximadamente hace cuatro años y medio que llegó a nuestra ciudad, Esperanza,
cuando adquirió el 50 por ciento de la Compañía Regional de Lácteos Argentina
Sociedad Anónima (Corlasa).
-¿A qué se
dedica fundamentalmente?
-A la
producción de leche en polvo.
-¿Cuánta
gente trabaja ahí?
-Aproximadamente unas 100 personas, la producción de leche en polvo no genera
mucho empleo.
-¿Cómo ha
sido el comportamiento de la empresa en este tiempo?
-El Grupo
Gloria inicialmente se asoció con el grupo local Gonella,
especializado en la producción de calderas y dueña de algún tambo, una familia
reconocida en la ciudad de Esperanza. La sociedad era de 50 por ciento para cada
Grupo.
En su momento
hubo como una suerte de puja entre los dos para ver cuál se quedaba con la
empresa, y en 2010 el Grupo Gloria logró el control del 100 por ciento de
la empresa.
-¿Cómo es
la relación con el Sindicato?
-De entrada
fue bastante dura porque no permitían la afiliación de los trabajadores y hubo
muchos problemas de abuso. Te cito un ejemplo: varios compañeros fueron a
Perú y a Bolivia para capacitarse en el área de leche en polvo, pero
cuando volvían los hacían trabajar demasiadas horas, algunos hasta 20 horas
corridas.
Cuando
alguien se afiliaba, el despido era seguro y eso sucedió con varios compañeros.
Entonces
empezamos una fuerte labor sindical merced a la cual logramos la afiliación de
40 trabajadores, todos el mismo día. Eso nos llevó unos 7 meses de trabajo.
Hoy tenemos
al 90 por ciento de la plantilla afiliada, hemos formado buenos delegados y
estamos dando una lucha permanente.
-¿Y cambió
el comportamiento de la empresa?
-Sí, claro.
Hay problemas como en cualquier planta, pero la actitud antisindical hace parte
de la historia y ahora se nos respeta.