El Frente Nacional de Productores de Leche advirtió que
si la Secretaría de Economía sigue permitiendo la
importación indiscriminada de lácteos, a corto plazo se
perderán un millón y medio de empleos directos de
pequeños productores y ese alimento básico se elevará
hasta 25 pesos por litro. Con dos vacas muertas colgadas
a la puerta de la dependencia y con vísceras regadas por
la banqueta, el presidente del Frente, Alvaro González
Muñoz, y un grupo de productores exigieron ser recibidos
por el secretario Sergio García de Alba para exponerle
la urgencia de que se regule la importación de lácteos,
que se evalúen proyectos de financiamiento para pequeños
productores, y no sólo los recursos que se dedican a los
industriales para sus procesos de secado. Precisó que
esta movilización no tienen ningún tiente partidista,
''sólo el blanco y negro con el que se visten las
vacas''.
El productor explicó que el principal conflicto del
gremio consiste en las crecientes importaciones de leche
por efecto de los tratados de libre comercio, pero
especialmente en lo que va de 2006, por la entrada de un
cupo de 40 mil toneladas autorizado por la Secretaría de
Economía, a finales del año pasado. Aseguró que esta es
la peor crisis por la que han pasado los productores de
leche, debido a que de los 9 millones de litros diarios
que producen, 40 por ciento no tiene dónde colocarse,
así que se tienen que tirar, o en un intento desesperado
los lecheros van a las ciudades a tratar de vender a los
queseros o a las industrias, y ''ahí se encuentran con
que se las pagan a 80 centavos, a 1.50 pesos, como mejor
precio, cuando el costo de producción es de
aproximadamente 3.80 o 4.20 pesos por litro, dependiendo
de la región. Si la venta es a la industria, el pago es
de 3.40 o 3.50.
Frente la puerta de la Secretaría de Economía, con una
vaca muerta colgada de un poste, abierta en canal y con
las vísceras regadas por la banqueta, junto a otro
animal en las mismas condiciones, el productor abundó
sobre la peor crisis de este gremio. ''El asunto no
acaba ahí, porque como les
compran fiado, los industriales se tardan en pagarles,
lo hacen por partes o de plano los ganaderos no vuelven
a ver su dinero. Es dramático lo que se vive entre los
ganaderos, por eso le pedimos al gobierno que tenga la
voluntad necesaria y la voluntad política para voltear a
ver a los mexicanos. Los funcionarios viven en lugares
muy bonitos y se pasean por lugares muy exclusivos; pasa
que ven el mundo de manera muy diferente y no saben lo
que es tener que tirar la leche de la que se vive o ver
morir a la vacas porque no hay dinero para comida o
medicinas, o resignarse a perder un hijo o un padre que
se va a trabajar a Estados Unidos''.
Advirtió que por más que la Secretaría de Economía diga
que hay apoyos para programas como el de secado, eso
sólo beneficia a los industriales porque ellos son los
que reciben el dinero. ''No es verdad que están pagando
los excedentes de leche en 3.20 pesos por litro como se
había pactado, al contrario, incluso están rompiendo los
tratos con sus proveedores. Un día estábamos en una
reunión aquí en Economía, y nos hablaron de Jalisco para
avisar que una empresa acababa de romper con 150
ganaderos que producían 200 mil litros al día y a otros
los tienen amenazados con correrlos si exigen sus
derechos''.