Más
de 40 trabajadores de la empresa FAMOLCAS S.A de C.V. -que
forma parte del mismo grupo LIDO- irrumpieron con violencia
en la planta de producción en la capital salvadoreña, donde
los afiliados y afiliadas al Sindicato de Empresa LIDO SA (SELSA)
están sosteniendo una huelga legal, exigiendo a la empresa
su derecho a la negociación colectiva. Varias mujeres han
sido golpeadas y la producción fue reactivada de forma
ilegal.
“A
las 7 de la mañana de este miércoles unos 40 rompehuelgas,
enviados por la empresa, entraron en las instalaciones de la
planta de producción.
Comezaron a rodear, empujar y golpear a la gente que estaba
en huelga, sobre todo a las mujeres.
Finalmente lograron sacar a toda la gente y echaron a andar
las máquinas, reactivando la producción”, explicó a Sirel,
Alfredo Osorio, secretario primero de conflictos del
SELSA.
La
violenta acción ordenada por la empresa dejó un saldo de
varias trabajadoras lesionadas, mostrando, una vez más, la
verdadera cara de una patronal que está violentando, sin
ningún escrúpulo, todo tipo de legislación laboral vigente.
“A
la brutal acción se sumaron jefes de planta y el subgerente
de Producción, José Heriberto Pacas, quienes
arengaban a los rompehuelgas para que atacaran y sacaran del
lugar a los miembros del Sindicato”, continuó Osorio.
José Heriberto Pacas
es el mismo personaje que en la huelga del año pasado acusó
a Atilio Jaimes Pérez, secretario general del
SELSA, de haberlo amenazado de muerte, lo cual condujo
a la injusta e ilegal detención del dirigente sindical.
Después del desalojo y de la reactivación de los tres
hornos, supuestamente para garantizar un pedido especial de
Río
Grande Foods Products,
la empresa distribuidora de productos LIDO en
Estados Unidos miembros de SELSA se personaron
ante el Instituto de Medicina Legal y la Fiscalía, para
interponer formal denuncia por la agresión sufrida, la
violación al derecho a la huelga y la contratación de
personal para reemplazar a quienes están en huelga.
“También vamos a
pedir al Ministerio del Trabajo que de inmediato envíe una
inspección y vamos a denunciar lo ocurrido ante la
Procuraduría de Derechos Humanos, a cuyos miembros la
empresa negó el acceso a la planta para que constataran os
hechos”, expresó el directivo sindical.
En este momento
los trabajadores y trabajadoras del SELSA se
mantienen en las afueras de la planta de producción.
“Lo que ha
ocurrido hoy es una vergüenza. Demuestra que la empresa
nunca ha buscado un acercamiento, sino que continúa con su
actitud de enfrentamiento con el Sindicato, en abierta
violación de la legislación laboral y de los Convenios
internacionales ratificados por El Salvador.
A estos señores
no les interesa absolutamente nada y esperamos que las
autoridades laborales hagan respetar las leyes del país.
Vamos a mantenernos vigilantes y firmes frente a la planta,
preparados para lo que venga”, concluyó Osorio.