Trabajadores lecheros, uníos |
Ante
la concentración mundial de la industria lechera en un puñado cada vez más
reducido de transnacionales, dos de las más importantes organizaciones
sindicales que representan a los trabajadores y trabajadoras del sector
lácteo a nivel mundial, han decidido coordinar sus capacidades y recursos.
Constituida
en 1967, la Rel fue la primera regional de la UITA. De esa manera se
resolvió con acierto que los problemas y desafíos de las organizaciones
afiliadas en América Latina, fueran abordados en diferentes instancias
democráticas, y que la labor cotidiana organizativa, de coordinación y
solidaridad estuviera a cargo de una Secretaría con sede en la región.
Reseñamos este episodio con el ánimo de destacar que nuestra regional surge
como resultado directo de la aplicación de una política de descentralización
que en aquel entonces impulsara la Secretaría General de la UITA.
Fiel a esa
impronta, desde su constitución la Secretaría Regional ha impulsado una
serie de medidas y diseñado múltiples espacios con la finalidad de
democratizar su accionar, promoviendo respuestas colectivas y coordinadas
para los diversos problemas que enfrenta el movimiento obrero.
En este
contexto, la X Conferencia Regional Latinoamericana (Buenos Aires,
21-25/10/91) imprimió otra aceleración al proceso de descentralización. Fue
en esta tribuna soberana donde se aprobó la propuesta de creación de los
Departamentos Profesionales, en cada sector de industria o área temática:
agricultura, salud, etc., donde reubicamos a más gente REFLEXIONANDO y
ACTUANDO en toda la región.
En 1999, en
Montevideo, las organizaciones afiliadas a la UITA que integraban la
Coordinadora de Trabajadores de la Industria Láctea del Cono Sur (COTILCOS),
constituyeron el Departamento de Trabajadores y Trabajadoras de la Industría
Láctea, que desde entonces es coordinado por la Asociación de Trabajadores
de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA).
En sus seis
años de existencia, este Departamento ha desempeñado una labor destacada.
Entre sus acciones resaltamos: la Conferencia de Trabajadores de
Parmalat (Mar del Plata,
25-26/06/03), donde la coordinación de tareas y estudios posteriores
permitió a los sindicatos estar mejor posicionados cuando se produjo el
crack mundial de Parmalat
en 2004; y la VII Conferencia Latinoamericana de Trabajadores de
Nestlé (Buenos Aires
13-14.11.2003), donde se decidió impulsar un estudio sobre las Lesiones por
Esfuerzos Repetitivos (LER) en toda la región, y que para Brasil se
transformó en la plataforma de lanzamiento de la investigación que culminara
con el libro “Masacre Silenciosa”, (Enfermedad Invisible en la
Nestlé de Araras), del
periodista Carlos Amorín.
A estas
actividades debemos sumarle las acciones de respaldo y apoyo que realiza el
Departamento en cada una de las campañas de solidaridad internacional
implementadas por la Rel-UITA.
Hacia nuevos desafíos
Los días 21
y 22 de noviembre se realizó en Buenos Aires el “Taller Estratégico de
Trabajadores del Sector Lácteo”, en el cual participó ATILRA, la
Confederación de Trabajadores de Empresas de la Alimentación y Área Privada
de Chile (CONTALAPCH) y el Sindicato de Trabajadores Lecheros de Nueva
Zelanda (NZDWU, por sus siglas en inglés). Al término de la actividad se
acordó suscribir un convenio de cooperación entre ATILRA y el NZDWU. Con
ello inauguramos una nueva modalidad que favorece aún más la articulación
del trabajo, potenciando, desde lo local, la acción internacional de la UITA.
Consultado
sobre el alcance del convenio, Héctor Ponce, Secretario General de ATILRA,
manifestó: “Esta iniciativa de nuestra Secretaría Regional representa un
compromiso muy serio por medio del cual ATILRA, en nombre del Departamento
Lácteo de la Rel-UITA, y el NZDWU, vamos a unificar objetivos y consolidar
estrategias en defensa de los intereses de los trabajadores y trabajadoras.
Fonterra,
cooperativa emblemática neozelandesa, está operando en la región y en
Argentina. Es por ello que en el convenio se prevé, entre otros puntos
importantes, formalizar un proceso de vigilancia en América Latina sobre el
cumplimiento del Acuerdo Marco firmado por UITA, Fonterra y NZDWU, con el
visto bueno del gobierno de Nueva Zelanda y la OIT en 2002”.
Cabe
recordar que Argentina y Nueva Zelanda, hacen parte de la Alianza Láctea
Global, junto a Australia, Brasil, Chile y Uruguay. Constituida en 2002, la
Alianza agrupa a 1,5 millones de productores y 60.000 millones de litros
anuales de producción. En 2002, esos seis países representaron el 55 por
ciento del comercio internacional de lácteos.
En virtud
de sus condiciones climáticas excepcionales para la actividad y a la
avanzada tecnología disponible, Nueva Zelanda, registra una producción por
hectárea sustancialmente mayor que la Argentina, pero ve acotadas las
posibilidades de incrementar su producción por la escasez de tierras aptas
para la lechería.1
Por eso la neozelandesa Fonterra,
primera en el comercio mundial de lácteos, no sólo estableció una alianza
estratégica con la argentina SanCor
(la mayor exportadora láctea de ese país con una capacidad de proceso de
5.500.000 de litros de leche diarios en 17 plantas industriales), sino que
también se especula sobre sus planes de construir una planta en el MERCOSUR.
“Esta parte
de América Latina ha sido elegida por las principales transnacionales,
porque tanto Argentina, como Brasil y Uruguay, ofrecen muy buenas
perspectivas desde el punto de vista del crecimiento de la producción. Por
otro lado, se aguarda un importante incremento del consumo de productos
lácteos en nuestra región”, comentó Héctor Ponce.
Por eso hoy
más que nunca reafirmamos la vigencia de las definiciones estratégicas
adoptadas por la Regional, tanto en el aspecto de su funcionamiento interno
que habilita una mayor autonomía y por tanto más democracia, como en la
visión de pensar y actuar local y globalmente.
Gerardo Iglesias
© Rel-UITA
28 de
diciembre 2005
1
Informe Sectorial Sobre Leche y Productos Lácteos (Febrero, 2000)