Brasil

La Secretaría Especial de Políticas para las Mujeres, creada durante el actual gobierno, y el Centro Nacional de los Derechos de la Mujer son las instituciones organizadoras de esta segunda edición de una Conferencia que reúne a tres mil mujeres representantes de organizaciones sociales y políticas de todo Brasil con funcionarios y funcionarias del gobierno y el Estado, junto a decenas de invitadas extranjeras. La actividad, que se desarrolla en el Centro de Convenciones Ulysses Guimaraes, en Brasilia, comenzó el pasado viernes 17 y culmina hoy.

La ceremonia de apertura se realizó en la noche del viernes 17 con la presencia del presidente Lula y la mayor parte de su gabinete ministerial, dando una clara señal de la importancia que el gobierno le asigna a esta reunión. En un clima de alegría y gran expectativa, la vicepresidenta de la Central Única de Trabajadores (CUT) y coordinadora de la Comisión de Mujeres de la Confederación Nacional de Trabajadores en la Agricultura (CONTAG), Carmen Foro, se dirigió a la asistencia en representación de toda la sociedad civil representada en la Conferencia.

En diálogo posterior con Sirel, Carmen confesó sentirse muy agradecida y emocionada por haber sido designada para tomar la palabra en representación de la sociedad civil en una reunión tan importante como esta Conferencia. También efectuó una síntesis de su intervención.

“Esta Conferencia tiene el propósito de evaluar lo que se ha hecho desde la anterior edición en 2004, y de readecuar y elaborar nuevas directrices para el período que viene. Hemos reconocido que la creación de la Secretaría Especial de la Mujer ha tenido un significado muy importante en la práctica. Otro tanto ha ocurrido con la Secretaría Especial de la Igualdad Racial. Un punto importante que señalamos es la aprobación de la ley llamada ‘María da Penha’ y un conjunto de otras medidas adoptadas por el gobierno, entre las que se puede destacar la prioridad acordada a la lucha contra la violencia hacia la mujer. No obstante, más allá de estos reconocimientos, también señalamos que todavía son muchos los desafíos que tiene el Estado brasilero en relación con la lucha contra la desigualdad. En nuestra intervención marcamos tres puntos esenciales: en primer lugar, que todos los avances que se han logrado concretar hasta ahora sean transformados en políticas de Estado, porque sabemos que los gobiernos pasan, pero los Estados permanecen y con él sus políticas; esto es, debemos consolidar nuestras conquistas. En segundo lugar, hemos reclamado mayor presencia en el presupuesto del Estado de las políticas de la mujer, porque de nada sirve el avance legal si el proceso de enfrentar las desigualdades carece de recursos para hacerlo verdaderamente efectivo y eficaz. Finalmente, el tema de la participación política de la mujer fue otro de los puntos que planteamos, porque no sólo reviste una enorme importancia, sino que también tiene ahora una gran actualidad mientras se debate una próxima reforma política en el país. La participación política de la mujer debe transformarse en una realidad generalizada, y no quedarse solamente en esta Conferencia, nos referimos a espacios de poder en todos los sectores de la vida política de Brasil.

Entendemos que para que las conquistas sean ampliadas, es necesario que la sociedad civil esté movilizada. En ese sentido, el proceso de preparación de estas Conferencias ha sido extraordinario, porque movilizó a centenares de miles de mujeres en todo el país. Por otra parte, si a ello le sumamos  el proceso de la CONTAG preparando nuestra Marcha das Margaridas que traerá la próxima semana miles de mujeres a Brasilia, estamos hablando de millones de mujeres movilizadas, evaluando las políticas del gobierno, haciendo propuestas. Puedo decir que, a esta altura, no hay ni un rinconcito de este país donde no se sepa qué es la Marcha das Margaridas. Todas estas mujeres están mirando estos días a Brasilia, evaluando los anuncios que hará el Ejecutivo acerca de cuántos recursos serán destinados a estos temas, cuál será el presupuesto para las estructuras del Estado concernidas, cuál será el plan propuesto por el gobierno, porque estamos disputando qué proyecto de país se impulsará. Estos proyectos deben tener en cuenta, por ejemplo, el hecho de que las mujeres somos la mayoría de la población, pero apenas representamos el 9 por ciento del Congreso Nacional. El camino es largo, pero ya hemos dado los primeros pasos. Ahora a consolidar y a continuar”.

Con respecto al significado que esta Conferencia tiene específicamente para la CONTAG, Carmen explicó que “Las mujeres rurales hemos empezado a participar bastante recientemente en estos espacios, y todavía nos falta participar mucho más. El Consejo Nacional de los Derechos de la Mujer, por ejemplo, siempre estuvo integrado por grandes estudiosas, y recién en esta gestión tiene un composición más variada, con trabajadoras, representantes de la sociedad civil y gente que justifica su presencia con propuestas concretas. Para nosotras ya es una victoria muy grande poder participar en ése y en otros Consejos similares. La CONTAG comprometió fuertemente su presencia en el proceso de preparación de esta Conferencia Nacional, participando muy activamente en las Conferencias Municipales y Estaduales. Tengo la certeza de que logramos influir el contenido de la agenda nacional aportando temas básicos de nuestra lucha que no estuvieron presentes en la Conferencia de 2004. Me refiero al medio ambiente, la seguridad y soberanía alimentarias, la reforma agraria y la violencia con foco en las trabajadoras rurales. En ese sentido, tenemos la impresión de que ahora se ha entendido a nivel de gobierno que se precisa una política específica para luchar contra la violencia hacia la mujer en el medio rural, ya que las leyes generales aprobadas hasta ahora son demasiado vagas e inespecíficas a la hora de enfrentar el problema en nuestros ámbitos.

Convocada por Sirel a enviar un mensaje a todas las mujeres de la UITA en este momento de gran movilización en Brasil, Carmen expresó que “Están ocurriendo muchas cosas tristes en el mundo, pero también muchas cosas buenas y positivas. Se están abriendo claramente los espacios políticos para las mujeres, pero nosotras debemos organizarnos más y mejor, debemos entretejer más intensamente nuestros deseos y nuestros sueños. Cuanto más cerca estemos las unas de las otras, más rápido llegará el mundo por el que luchamos, y éste debemos transformarlo con nuestra participación, con nuestra militancia, con nuestras propuestas y nuestra coordinación. Creo que vamos caminando en ese sentido”.

En Brasilia, Carlos Amorín © Rel-UITA 20 de agosto de 2007

 Foto: Carlos Amorín

 Volver a Portada