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En
el pasado mes de noviembre, Greenpeace dio a
conocer la nota que le remitiera Mathias C. Baumgarten, Director de
Comunicaciones de McDonald´s,
Alemania. En la misma, la empresa respondía a las críticas del grupo
ecologista señalando: “en Alemania nos estamos acercando cada vez más a nuestro objetivo de
eliminar los transgénicos en alimentos para pollos y lo lograremos antes del
comienzo de mayo del 2001.” Seguidamente
agregaba: “McDonald´s está
monitoreando cuidadosamente los deseos y preocupaciones de sus consumidores,
especialmente cuando se trata de la confianza en sus productos. La confianza de
nuestros clientes es nuestra prioridad absoluta.” Semanas más tarde,
nos enteramos que las sucursales de McDonald´s
en la mayoría de los países de
Europa Occidental, adoptaban la misma decisión que en Alemania.
Ahora
nos llegan noticias desde el Reino Unido. Monsanto
emitió un comunicado de prensa el pasado mes de marzo en el cual manifiesta que
está retirando del mercado sus papas genéticamente modificadas NewLeaf,
las cuales tienen incorporada una toxina que pretende combatir al escarabajo de
la patata. Un artículo publicado recientemente por la revista Food
Magazine (1), consigna que NewLeaf fue
lanzado por Monsanto en 1995 y
“tuvo una sólida publicidad dirigida a
los agricultores como un cultivo que podría reducir sus cuentas de
insecticidas. La aceptación de este producto fue lenta, pero hacia 1999
alrededor de 22.250 hectáreas de América del Norte estaban plantadas con papas
genéticamente manipuladas de la marca NewLeaf.”
Cuando
McDonald´s da instrucciones a todas
las empresas proveedoras de sus restaurantes en el viejo continente, que se
cercioren de cumplir con su política de no trabajar con productos genéticamente
manipulados, J. R. Simplot –la
principal proveedora– envió una carta a los agricultores con la sugerencia de
que abandonaran la variedad NewLeaf.
Según
Food Magazine, el área sembrada de NewLeaf,
se había reducido a la mitad, y este año tal vez sea el último en que la
variedad sea utilizada. “Las
papas son un importante producto, esperamos volver a esa especialidad algún día”,
dijo Lori Fisher, vocera de
Monsanto. “¡Pero andá a
plantar papas!”, como se dice por acá.
McDonald´s
ha retirado los productos modificados genéticamente de sus locales en Europa,
lamentablemente no ha realizado lo mismo por nuestras latitudes. En
consecuencia, nos encontramos frente a una “empresa global”, pero que admite
tener clientes de primera y de segunda categoría. “La
confianza de nuestros clientes es nuestra prioridad absoluta”,
afirma el señor Baumgarten ... siempre que los clientes sean alemanes,
agregamos nosotros.
¿Cómo
explicar la política de McDonald´s
en Europa? Simple, es una cuestión de mercado y si se quiere, de habilidad
publicitaria. Es allí, en Europa, donde los grupos ecologistas, sindicatos y
organizaciones de consumidores, se han opuesto con mayor fuerza a los transgénicos.
Es allí además, donde ha estallado el problema de las dioxinas, el mal de las
vacas locas, la aftosa y donde la gente exige –más
que en ningún otro lugar–
alimentos sanos. Que nadie piense ingenuamente que en esta política de McDonald´s
está presente el menor atisbo de compromiso social. En su nota el señor
Baumgarten, hace referencia al término clientes
y no al término ciudadanos. Por
ello, no le interesa que en la producción de los juguetes para las “cajitas
felices” en
China trabajen niños y niñas en condiciones inhumanas, ganando jornales
miserables, o ser una de las empresas más antisindicales del mundo.
En
el tema de las papas, McDonald´s
anda peleada con Monsanto,
no obstante,no hay diferencias en la forma como la empresa “hamburguesera”
trata a sus trabajadores y Monsanto
a los campesinos. La
misma política ... la misma prepotencia.
...... vean la información consignada sobre McDonald´s en nuestro artículo "Motín a Bordo"
(1) Food Magazine 53. Abril/Junio 2001
Autor:
Gerardo Iglesias
©
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