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Una
temible trinidad
Los trabajadores de
Transportes Ricardo Concha
Ltda.
–que entre otros,
distribuye productos de
Nestlé–
cansados de los
abusos de su empleadora se
reunieron el pasado 26 de
mayo en asamblea para
constituir su sindicato y
elegir autoridades,
responsabilidad que recayó
en los compañeros Miguel
Donoso Dueñas
(presidente), Marcos
Erices Cáceres
(secretario) y Juan
Venegas Díaz (tesorero).
Asesorados por dirigentes de
la Federación de
Trabajadores de Nestlé Maipú
(afiliada a la UITA a
través de la Confederación
de Federaciones de Empresas
Alimenticias y Afines de
Chile
–CONFEDACH–) el
acto se registró, tal como
lo dispone la legislación
chilena, ante notario
público.
A poco de haber finalizado
la asamblea y los trámites
mencionados, Miguel
Donoso y Marcos
Erices comenzaron su
aprendizaje sobre los
riesgos que encierra ser
dirigente sindical en
Chile. Junto con los
dirigentes de la
Federación de Trabajadores
de Nestlé, Héctor
López Albornoz y
Jerónimo Guzmán Segovia
se trasladaban hacia la
planta de Nestlé en
un camión de Transportes
Concha conducido por
Miguel Donoso, quien
está autorizado a llevar el
vehículo a su domicilio al
finalizar su jornada de
trabajo. Pocos metros antes
de llegar a la planta fueron
detenidos por un grupo de
carabineros fuertemente
armados que se trasladaban
en varias patrullas. Uno de
los carabineros,
identificado como el “cabo
Gutiérrez”, gritó: “al
suelo conchaesumadres” y
sin más trámite los
compañeros fueron obligados
a tenderse boca a bajo en
plena calle, mientras las
armas les apuntan a la
cabeza y los transeúntes los
observaban atónitos.
El cinematográfico operativo
–el número de ululantes
patrullas aumentaba a cada
minuto– fue seguido desde un
vehículo de la empresa por
Luis Aqueveque,
supervisor de Transportes
Concha y poco más tarde
también se hace presente en
el lugar Ricardo Concha
Espinoza, titular de la
firma. Posteriormente, sin
aceptar ninguna explicación,
los carabineros suben a los
compañeros esposados a una
patrulla trasladándolos a
un local policial, donde se
enteran que se les acusa de
haber robado el camión.
Posteriormente, Ricardo
Concha manifiesta que no
tiene ninguna acusación que
formular contra los
dirigentes de la
Federación Nestlé, pero
amenaza con formalizar
cargos contra sus empleados,
los dirigentes del
recientemente constituido
sindicato.
Teniendo en cuenta el
despliegue de fuerzas y la
bravura demostrada por sus
hombres, al cabo
Gutiérrez le parece poco
que tamaño operativo
finalice con un sólo
acusado. Por lo tanto,
haciendo gala de una
perspicacia acorde con su
grado, argumenta que si se
inculpa al chofer, los
acompañantes quedan
implicados como encubridores
del robo. Como las cosas ya
iban demasiado lejos,
Ricardo Concha desiste
de formular denuncia alguna
y los detenidos quedan en
libertad.
Como si de una obra del
teatro griego se tratase,
esta historia tiene una
parte jocosa –la
anteriormente narrada– y
otra dramática, la que a su
vez tiene tres actores
principales:
-
Transportes Ricardo Concha
Ltda.
– Que no vacila en denunciar
falsamente por hurto a dos
de sus empleados, buscando
lograr su despido– o cuando
menos atemorizarlos por
haber sido electos
dirigentes del sindicato
recientemente creado.
-
Carabineros de Chile
–
Que a casi 20 años
del regreso a la democracia,
la prepotencia y brutalidad
de hacen gala gran parte de
los integrantes del cuerpo,
recuerdan la época de la
dictadura. Entre los valores
que se dice deben
caracterizar a un carabinero
se citan prudencia, dignidad
humana, principio de
proporcionalidad, honestidad
e imparcialidad profesional.
Atributos que están muy
lejos de los exhibidos por
el cabo Gutiérrez y a
los que alguien debería
recordárselos.
-
Nestlé Chile
– Bajo el pomposo título
Principios Corporativos
Empresariales de Nestlé,
puede leerse: “Nestlé
apoya plenamente los cuatro
principios rectores del
Global Compact de Naciones
Unidas en materia de trabajo".
Por lo tanto, apoya:
"La libertad de asociación y
el reconocimiento real del
derecho a la negociación
colectiva.
(Principio 3)".
Además, también puede leerse
que, “Nestlé utiliza las
Directrices revisadas de la
Organización de Cooperación
y Desarrollo Económicos
(OCDE)
–organismo al
cual Chile está
próximo a ingresar–
para
Empresas Multinacionales.
Dentro de estas Directrices
se encuentra el derecho de
sus trabajadores a ser
representados por
sindicatos.
Por otra parte, el Código
de Conducta Empresarial de
Nestlé aclara que “a los
fines del presente Código,
las referencias al término
“empleados” incluyen a los
empleados, asociados,
funcionarios y directores de
Nestlé S.A. y
sus subsidiarias (el
subrayado es nuestro). De
manera que Transportes
Ricardo Concha Ltda.,
por su condición de
asociada, tiene la
obligación de cumplir con lo
dispuesto en el Código de
Conducta y si no lo hace,
Nestlé debe recordárselo
y obligarla a cumplir con
algo tan claramente
establecido.
Lo acontecido fue tan
bochornoso y tantos los
derechos sindicales, cívicos
y humanos violentados, que
confiamos en que resulte
rápidamente reparado y no
tengamos que volver a
ocuparnos nuevamente del
tema. También tenemos
derecho a exigir que los
Principios Corporativos
Empresariales de Nestlé
dejen, de una vez por todas,
de ser considerados un
simple instrumento de
propaganda.
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