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Para expresar su
protesta por el veto del presidente uruguayo Tabaré Vázquez a los artículos de
la ley de Salud Sexual y Reproductiva que consagraban la despenalización del
aborto, un deseo de la mayoría de la sociedad uruguaya, feministas de distintas
organizaciones realizaron un plantón frente a la embajada del Uruguay en el
Perú.
En San Isidro, uno de los más exclusivos distritos
residenciales de Lima y de emergente desarrollo empresarial, grupos de
mujeres con pancartas se reunieron ante la sede de la embajada y por espacio de
una hora expresaron su respaldo a las mujeres uruguayas. Sus lemas, acompañadas
con el repique de dos tarolas1 rompieron el silencio y llamaron la atención de vecinos y
transeúntes.
“No al veto en el Uruguay”, “Mi cuerpo es mío ni
del Estado ni de la iglesia”, “Aborto legal para no morir”, “Las compañeras del
Uruguay no están solas”,
fueron algunas de las consignas lanzadas por integrantes del
Centro Flora Tristán, del grupo Lesbianas Independientes Feministas Socialistas,
Movimiento Amplio de Mujeres, DEMUS, Red Nacional de Promoción de la Mujer.
Asimismo, participaron en el
plantón representantes de la Campaña por la Convención de los Derechos Sexuales
y Derechos Reproductivos, Federación Nacional de Mujeres Campesinas Artesanas
Indígenas Nativas y Asalariadas del Perú (Femucarinap), Vulva Memories,
Lundú
Centro de Estudios y Promoción Afroperuano,
Cladem Perú, Milenia Radio, entre otras.
En representación de las manifestantes, María Ysabel
Cedano, coordinadora del punto focal peruano de la Campaña 28 de Septiembre
por la Despenalización del Aborto en América Latina y el Caribe, y Gina
Vargas, del Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán, fueron recibidas en la
sede diplomática por el embajador uruguayo José Ignacio Korzeniak.
Al término de la reunión, Vargas y Cedano
informaron a sus compañeras apostadas frente a la embajada que se trató de un
encuentro cordial, en el que el embajador Korzeniak reconoció –aunque no
compartió- los argumentos por ellas presentados en el sentido de que el veto al
aborto es un asunto de democracia y de justicia.
“Le hemos dicho que vamos a volver con un documento en el que
puntualizaremos nuestros argumentos frente a los usados por el mandatario
uruguayo para sustentar su veto. También le dijimos que nos van a ver más
seguido si el presidente Vázquez no los toma en cuenta, porque si tocan a
una, nos tocan a todas las feministas”, afirmó Cedano.
El mandatario uruguayo, médico
oncólogo de profesión, en reiteradas oportunidades manifestó que no promulgaría
la ley, porque contenía elementos con los que "filosófica y biológicamente" no
estaba de acuerdo.
Pese a la posición del Presidente, en las dos Cámaras se
aprobó la ley que permite a la mujer decidir la interrupción de su embarazo
durante las doce primeras semanas de gravidez, alegando situaciones de penuria
económica, familiares, de edad, de salud, de malformaciones del feto o de
peligro de la vida de la madre.
Para levantar el veto
presidencial se requiere una mayoría especial de 3/5 de ambas Cámaras.
En la actualidad 33 mil mujeres uruguayas
recurren a esta práctica cada año en forma clandestina, arriesgando su salud y
sus vidas.
Roxana Vásquez,
del Cladem Perú, consideró que el veto al aborto es una medida injusta y
antidemocrática. “El presidente Vázquez ya había anunciado el veto. No es
posible que un Presidente impida la voluntad de la mayoría y decida por
convicciones de naturaleza personal”, señaló.
“Necesitamos que la democracia se consolide a través del
respeto a la pluralidad de opciones y de decisiones.
Hacemos esta manifestación porque
sabemos que lo que pase en Uruguay o en otro país latinoamericano tendrá impacto
en todos los demás, pues es parte de una estrategia concertada para impedir que
nosotras hablemos en voz alta y ejerzamos nuestros derechos”,
explicó.
Rocío Muñoz,
de Lundú
Centro de Estudios y Promoción Afroperuano,
e integrante de la Campaña por la Convención de los Derechos Sexuales y Derechos
Reproductivos, expresó su solidaridad con las mujeres uruguayas que aspiran a
contar con marcos legales que permitan el ejercicio de sus derechos
reproductivos y tener la posibilidad de no morir a causa de un aborto inseguro.
“Creo que es una
arbitrariedad, una falta de respeto a la democracia y me cuesta trabajo entender
que un Presidente no escuche a las personas que lo han elegido precisamente para
dirigir su país.
En ese sentido, creo que es fundamental que el
presidente Vázquez reconsidere su decisión arbitraria y antidemocrática
que responde a posturas absolutamente conservadoras”.
Lourdes Huanta,
de la organización Femucarinap, indicó que su presencia en el plantón
obedecía a la necesidad de unir fuerzas para expresar apoyo a la lucha de las
mujeres del Uruguay ante una realidad que golpea también, y muy
duramente, a las campesinas que se practican abortos en condiciones inseguras y
peligrosas.
En los próximos días las organizaciones solicitarán una
audiencia pública con el embajador uruguayo para desarrollar sus argumentos
referidos a la justicia de su reclamo por la vigencia del derecho al aborto, el
mismo que es compartido por las organizaciones feministas de la región.
Esta acción, que generó alarma en la Policía nacional que
intento disuadir la presencia pacífica de las feministas peruanas, formó parte
de una iniciativa de solidaridad regional que tiene como lema “El veto está
solo”.
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