El pasado 8 de mayo el Sindicato Argentino de Trabajadores de la Industria Fideera (SATIF) firmó un nuevo Convenio salarial. Sirel dialogó con Enrique Terny, secretario general del sindicato e integrante del Comité Ejecutivo Latinoamericano de la UITA , quien comentó los logros para los trabajadores y trabajadoras del sector

-¿Cómo se desarrolló la negociación?

-En líneas generales, la negociación marchó sin presiones y sin medidas de acción directa, con una visión compartida con los empresarios sobre cómo se desarrollaban los acontecimientos en el país en materia salarial, buscando posicionar a la industria y a los trabajadores en el mejor nivel posible.

La nuestra es una actividad muy pequeña en números como para movilizarse, pero sí tiene la voluntad de ejercer los derechos de los trabajadores y de las trabajadoras en el momento que se considere oportuno.

-¿Cómo quedó establecida la nueva escala salarial para el sector?

-El acuerdo salarial que hemos alcanzado, si bien no es lo que los trabajadores del sector necesitan para tener una vida más digna, cumple con el mandato que nos dieron los delegados del 27 Congreso del SATIF. El incremento se pautó en tres etapas: un 10 por ciento a partir de mayo pasado, otro 10 por ciento a partir de septiembre y otro tanto a partir de enero de 2009. Esto es un aumento neto del 30 por ciento, con algunas sumas no remunerativas que van como alicientes de alguna situación inflacionaria. Se convino el pago de una suma fija de 350 pesos (113 dólares aproximadamente) no remunerativa, que se hará efectiva de la siguiente manera: 150 pesos junto con el pago de la primera quincena de octubre próximo para los trabajadores jornaleros y con los haberes del mes de octubre para los trabajadores mensualizados. Igual criterio se adoptará para el pago de los 200 pesos correspondientes fijados para febrero de 2009.

-¿Cómo evalúas este proceso?

-Lo más significativo de esta negociación y su desenlace es que con este incremento el sector se posiciona para la próxima negociación salarial con un nivel superior al que se venía dando que era aproximadamente del 20 por ciento. Por otra parte, cabe destacar que esta negociación se realizó dentro de un panorama bastante difícil que está atravesando el país, con el enfrentamiento del sector rural con el gobierno, que ya supera los 80 días. Esto está generando incertidumbre en el sector pues continúa paralizada la comercialización de granos, y la escasez de materia prima seguramente se reflejará en los costos de producción.