Los próximos 25 y 26 de octubre
tendrá lugar en Buenos Aires, Argentina, la 2ª Conferencia de Trabajadores del
Mercosur del Sector Carne que reunirá a representantes de sindicatos de la
subregión. Se analizará la coyuntura sectorial y se debatirá sobre la
conveniencia de crear una Coordinadora de Trabajadores de la Carne del Mercosur.
Para anticipar lo esencial de los contenidos de esta Conferencia, Sirel dialogó
con algunos de los representantes sindicales que participarán en la reunión.
Carlos
Molinares - Argentina |
Secretario de
Organización de la Federación Gremial del Personal de la
Industria de la Carne
-¿Cuáles son las
motivaciones de esta Conferencia?
-Analizar en conjunto
con los compañeros del Mercosur cuál es nuestra realidad en los distintos países
e intercambiar opiniones e información sobre ello. En el caso de Argentina,
estamos con muchas dificultades en el sector de carnes rojas y con
potencialidades de un enorme crecimiento en el avícola. Por ejemplo, enfrentamos
un grave problema de falta de hacienda para la faena, y sabemos que lo mismo
está ocurriendo en otros países de la zona, por lo que es necesario hacer una
evaluación conjunta de qué debemos esperar en el futuro,
ya que juntos representan 50 mil trabajadores y trabajadoras.
-¿Qué empresas han
llegado a la Argentina?
-JBS y el
Grupo Marfrig, de Brasil, están alcanzando una muy fuerte
presencia aquí. Por otra parte, debemos estar preparados porque vemos que en el
sector avícola no hay un techo de crecimiento predecible, y venimos de empresas
que han permanecido en las mismas familias durante décadas.
Ahora es probable que
las grandes transnacionales se interesen también en ellas, y eso puede provocar
grandes cambios.
-Hay una tendencia
clara a la transnacionalización del sector…
-Tenemos una creciente
presencia de empresas transnacionales que empiezan a extenderse por toda la
región, y debemos armonizar nuestras posiciones ante una misma patronal. Hay
diferencias de condiciones de trabajo y salariales que hay que conocer y
analizar para unificar los esfuerzos, de manera que los trabajadores podamos
crecer y coordinar al igual que lo hacen las empresas.
La coordinación
regional es una herramienta estratégica que ha venido desarrollando la UITA
y que creemos será muy eficaz. Nosotros lo hemos experimentado desde nuestra
Confederación de Asociaciones Sindicales de Industrias Alimenticias (CASIA)
que participa en las Federaciones Latinoamericanas de la Internacional.
Héctor
Morcillo - Argentina |
Secretario adjunto
de la Federación de Trabajadores de Industria la
Alimentación (FTIA)
-¿Cuál es la
importancia de esta Conferencia?
-Hoy más que nunca
esta Conferencia se impone por varias razones, entre ellas por el crecimiento
del sector, particularmente en esta región. La demanda ha aumentado y eso está
generando un gran boom en la producción con los inconvenientes propios de estas
situaciones. Además de expandirse o de crecer en volumen, el sector se está
concentrando en la propiedad,
especialmente por
capitales brasileros que han llegado a la Argentina tras los negocios de las
carnes.
Todo esto merece un
diagnóstico de los sindicatos y la búsqueda de mecanismos de análisis y de
acción para enfrentar los problemas comunes que tenemos en esta región.
-¿Cuál es el papel de
las coordinaciones regionales?
-Son fundamentales, ya
tuvimos experiencias previas como la coordinación internacional de la carne,
donde los representantes sindicales de Estados Unidos expresaron que
veían con preocupación el avance de la compra de frigoríficos tanto en ese país
como en Argentina por capitales brasileños, en un proceso que aún no ha
terminado. Ello está causando un fuerte impacto en la región, en la producción
como en la falta de animales para la faena en algunos países, lo que amerita
construir una visión estratégica para desarrollar políticas concretas.
En Argentina,
por ejemplo, la expansión del sector avícola está siendo muy importante, y se
prevé que será aún mayor en el futuro. Así que todo esto debe ser analizado y
sopesado por los sindicatos, teniendo en cuenta que esta región será sin duda la
principal proveedora de carne para todo el mundo.
Germán
González - Uruguay |
Secretario general
de la Unión de Trabajadores Rurales y Afines del Sur
del País (UTRASURPA)
-¿Por qué es necesaria
esta Conferencia?
-En el sector Carnes
de Uruguay hay una presencia dominante de empresas transnacionales como
la argentina Tres Arroyos (avícola) o las brasileñas JBS y
Marfrig.
Encontrarnos con
compañeros de otros países que trabajan también para estas transnacionales es
fundamental para conocer su realidad y buscar soluciones a los problemas que son
muy graves. En Uruguay, por ejemplo, estamos viviendo una crisis en las
carnes rojas que ha sido inventada por las Cámaras Empresariales en las que
participan estas transnacionales.
-¿Cómo inventada?
-Estas Cámaras
desarrollan un modelo de producción alentadas por una política gubernamental
equivocada que ya está provocando que haya
1.500 trabajadores en
el seguro de paro sólo en Marfrig.
En todo el sector hay
10 mil trabajadores y trabajadoras. La apertura a la exportación de ganado en
pie también colabora con el desabastecimiento, y provoca efectos colaterales,
por ejemplo en la industria del cuero, que debe enviar gente al seguro de paro y
no logra cumplir con algunos contratos.
Estamos en un régimen
de cuasi monopolio frigorífico que tiene consecuencias en los precios, y por eso
algunos ganaderos optan por la exportación en pie, porque consiguen mayores
beneficios que vendiéndole a la industria local. Si esta política continua
favoreciendo la salida del país de productos sin valor industrial agregado, la
crisis laboral en el sector será enorme.
Como trabajadores
rurales queremos ser incluidos en esta discusión estratégica porque formamos
parte de la cadena de producción, pero no tenemos visibilidad. Por ejemplo, los
trabajadores de la industria láctea están muy bien en muchos aspectos, pero los
trabajadores de los tambos no lo están, y lo lógico es que todos estemos en las
mismas condiciones.
-¿Qué esperas de una
coordinación sindical regional?
-Tenemos que logar que
los sindicatos del Mercosur puedan impulsar de manera común las
reivindicaciones de cada uno, por ejemplo, en las enfermedades por esfuerzos
repetitivos, en Brasil se está llevando a cabo una campaña formidable,
mientras que en Uruguay es un tema prácticamente oculto.
Queremos que las
organizaciones sindicales de países vecinos, conozcan esta realidad tan dura que
estamos viviendo con envíos masivos al seguro de paro, con retiro de beneficios
como en los frigoríficos de Colonia y Salto.
Queremos también
llamar la atención acerca de que en Uruguay al menos los trabajadores y
trabajadoras del sector avícola y porcino son excluidos de todos los beneficios
de los trabajadores rurales, especialmente los del Convenio 184 de la OIT
relativo a salud y seguridad en la agricultura.
Siderlei
de Oliveira - Brasil |
Presidente de la
Confederación Nacional de Trabajadores de la
Alimentación (CONTAC)
-¿Cómo caracterizarías
esta Conferencia?
-El sector frigorífico
en el Mercosur tiene hoy un potencial muy grande y se ha concentrado
mucho, especialmente en empresas brasileras como Friboi-JBS, Marfrig
y alguna otra. Estas empresas están entre las peores que pueda haber, porque se
instalan en el interior de los países, sobre todo de Brasil, donde muchas
veces no hay un movimiento sindical organizado.
Son ganaderos que se
transforman en propietarios de frigoríficos y que tienen una mentalidad muy
diferente de los patronos de las industrias tradicionales del sector alimentario
u otros. Es un problema muy serio, y esta Conferencia hará un análisis para ver
si conseguimos que los sindicatos tengan mayor incidencia.
En Brasil los
frigoríficos son los que dan peor tratamiento a los trabajadores, y estos se
están extendiendo por Uruguay y Argentina. Son empresas enormes,
pero tratan al trabajador peor que un matadero clandestino. Ocupan una mano de
obra muy importante,
en total sólo tres de las mayores empresas emplean a casi a 1 millón de personas,
pero se mudan fácilmente de un estado al otro, dejando tremendos dramas sociales
detrás. El proceso de concentración llevó a que centenares de plantas se
terminaran fusionando en cinco o seis empresas.
-¿Qué puede aportar
una coordinación regional?
-Estamos pensando en
una forma de organización que nos permita enfrentar esta situación, por lo menos
a nivel del Mercosur, aunque son transnacionales que ya tienen presencia
en Europa, Canadá y Estados Unidos.
Creo que estamos en el
camino correcto, como lo están probando las otras
Federaciones Latinoamericanas de la UITA.
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