Una multitudinaria
marcha indígena y campesina recorrió ayer, miércoles
9, el centro de Bogotá, culminando con un gran acto
que marcó nuevamente la oposición popular a los
decretos gubernamentales que condenan a la
desaparición a pequeños y medianos productores de
leche.
Con
el apoyo de Asociación Nacional de Expendedores y
Vendedores de Leche Cruda (ADELECAD),
Salvación Agropecuaria, Rel-UITA, la Central
Unitaria de Trabajadores (CUT) y la Unión
Nacional Agroalimentaria de Colombia (UNAC),
más de 7.000 hombres y mujeres representantes de
organizaciones de diferentes regiones del país,
marcharon por la Carrera 7 de Bogotá.
Lo
hicieron para protestar por la pretensión del
gobierno nacional de imponer los decretos 616, 3411
y 2838 de 2008, por los cuales se prohíbe el
comercio de leche cruda a partir del 20 de mayo de
2011.
También se movilizaron los campesinos y campesinas
del departamento de Nariño, al sur de Colombia,
e hicieron un multitudinario mitin que paralizó
Rumichaca, el principal puerto de frontera con
Ecuador.
La
marcha concluyó con una concentración en la Plaza de
Bolívar, en la que dirigentes indígenas y
campesinos, y el senador Jorge Robledo Castillo,
denunciaron una vez más las pretensiones
gubernamentales de
entregar
la totalidad de la producción de leche a las
transnacionales o monopolios nacionales,
que cuentan con estructura industrial para su
pasteurización.
Esta medida forma parte de una embestida contra la
producción láctea nacional -en especial la pequeña y
mediana-, cuya desaparición es necesaria para
imponer en el
mercado local los productos de lactocina
provenientes de Europa, absolutamente precarios en
nutrientes, pero cuyo ingreso masivo al país es una
condición exigida por Europa para la aplicación de
un Tratado de Libre Comercio (TLC) con Colombia.
Fue
muy importante la presencia de comunidades indígenas
que marcharon en comunión de intereses con los
campesinos, pequeños productores de leche, lo cual
da mucho más fuerza a la campaña de oposición a las
medidas del gobierno y la pretendida aplicación del
TLC con Europa y Estados
Unidos.
Antes de la marcha, el ministro de Agricultura,
doctor Juan Camilo Restrepo Salazar, envió
una respuesta a las organizaciones convocantes y que
apoyan la protesta, manifestando la decisión del
gobierno de aplazar nuevamente la aplicación de los
funestos decretos y sugiriendo por radio y
televisión que la marcha era innecesaria.
Pero la respuesta popular fue contundente e
inquebrantable, puesto que el objetivo principal es
la derogación absoluta de los decretos y no la
aceptación de medidas de ocasión que buscan
minimizar la protesta social.
La
lucha continuará con nuevas acciones y
manifestaciones ante el gobierno nacional.